Iñaki Urdangarin insiste en negar ante el juez que malversara dinero público
GARA | PALMA
El yerno del rey español, Iñaki Urdangarin, siguió insistiendo ayer ante el juez en negar que haya ordenado, consentido o conocido la presunta malversación de fondos públicos que el juez instructor del «caso Palma Arena», José Castro, y la Fiscalía Anticorrupción atribuyen al Instituto Nóos, que presidió entre 2003 a 2006. Urdangarin volvió a primera hora de la mañana de ayer, por segundo día consecutivo, al juzgado y al cierre de esta edición seguía respondiendo a la Fiscalía.
Desde que el sábado comenzara su comparecencia judicial, Urdangarin ha rechazado cualquier implicación en las supuestas irregularidades de Nóos, fundación sin ánimo de lucro; ha atribuido la responsabilidad de la gestión de las empresas investigadas a su exsocio, Diego Torres, y ha desligado de sus actividades profesionales a la infanta Cristina de Borbón.
Esa misma línea argumental mantuvo ayer, según indicaron fuentes judiciales, aunque varios abogados, que no el suyo, señalaron que contestó a todas las preguntas pero la respuesta a muchas de ellas era un «no sé» o un «no recuerdo».
El yerno del rey solo se declaró responsable de la administración de la empresa Aizoon, que tenía a medias con su esposa, según dijeron a Efe fuentes jurídicas. Ante las preguntas del juez Castro, que se han prolongado en total catorce horas y 20 minutos, Urdangarin confirmó que él administraba Aizoon y ha defendido la limpieza de su gestión.
El instructor le preguntado sobre facturas sospechosas como una de 600 euros que sirvió para pagar a la empleada de hogar de la ayudante personal de Urdangarin, ante lo que el imputado argumentó que necesitaba a su asistente todo el tiempo posible y para ello se aseguraba de liberarla de otras responsabilidades personales.
Ayer también habló del momento en que dejó el Instituto Nóos, en 2006, por recomendación de la Casa Real española y dijo que se le impusieron dos condiciones: que dejara sus actividades profesionales con entidades públicas y que abandonara sus negocios con Torres.
Reiteró ante que no sabía de la existencia de la trama de empresas para desviar dinero público que se le atribuye a él y a su exsocio, pero el juez insistió en reclamarle información sobre su participación en esta supuesta red empresarial, que estaría formada por la citada Aizoon, Nóos Consultoría, el bufete Tejeiro, Virtual Estrategies, Intuit, Shiriaimasu y De Goes Center for Stakeholder Management, ante lo que Urdangarin reiteró que desconoce la gestión administrativa y la facturación de estas sociedades, ya que de la gestión se encargaba Torres.