Desde que salió de la Real Sociedad, Asier Eizagirre solo ha vuelto una vez a jugar en casa y fue en el Barakaldo. No descarta volver algún día a su tierra, pero, de momento, está contento donde está. Tras salir de la Real ha pasado por el Novelda, Huesca, Hospitalet, Leonesa, Barakaldo, UE Lleida y Lleida Esportiu, donde está jugando en la actualidad.

¿Cómo le va en Lleida?

La verdad es que muy bien. El año pasado jugué todo. El equipo estuvo a punto de meterse en los play off y fue una buena temporada. En esta también estoy jugando y el equipo va a más. Estoy muy contento.

¿Ha habido algún problema?

Sí, en verano. El anterior club entró en liquidación y surgieron muchas dudas. No sabíamos con exactitud si iba haber un nuevo equipo, en qué categoría iba a jugar y tal como está el fútbol nos desconcertó bastante. Al final ha salido el Lleida Esportiu y las cosas van bien.

¿Qué diferencias hay entre la UE Lleida y el Lleida Esportiu?

La verdad es que muy pocas. A parte del nombre y de las personas que rigen el club, han cambiado pocas cosas. Los colores siguen siendo los mismos, el estadio también y yo diría que los socios siguen siendo los mismos y tampoco cambia la gente que viene a vernos, ni la categoría. Para la gente mayor sí que ha sido un palo ver desaparecer al equipo de su vida, pero pienso que el nuevo Lleida está haciendo bien las cosas.

¿Cobraron todo el año pasado?

Parece mentira, pero sí. La verdad es que no es lo habitual que un club entre en liquidación y desaparezca pagando a los jugadores, pienso que se habrán dado muy pocos casos así, pero hemos tenido la suerte de cobrar todo y tal como está el fútbol eso es muy importante. El Lleida actual es nuevo, no debe dinero a nadie y nosotros también estamos cobrando con puntualidad. Viendo los problemas que hay en la Segunda B, hay que reconocer que somos unos privilegiados, pienso que alguien tiene que tomar responsabilidades, porque lo que está pasando en muchos clubes de Segunda B es inaceptable, pero de momento sigue y habrá que continuar. Por fortuna, en Lleida estamos muy bien.

¿Se nota que el equipo de la ciudad ha estado más arriba?

Sí, se nota mucho. Se ve que no hace tanto estuvo en Primera y que hace muy poco estuvo en Segunda. Nos vienen los 1.500 de siempre al campo, pero luego tiene mucha repercusión, tanto a nivel social, como a nivel de medios. El organigrama que tiene el equipo es también muy bueno. Ahora nos toca a nosotros llevar al club a donde le corresponde estar.

¿El objetivo es jugar el play off de ascenso a Segunda?

No, este año no. El equipo salió tarde, por todos los problemas que hemos mencionado antes y el primer objetivo es la permanencia. Ahora estamos bien, casi hemos logrado los puntos necesarios para ello y sí que en algunos sitios se empieza a hablar de los play off, pero no es el objetivo. Si lo conseguimos será un premio para todos los estamentos del club.

¿Hay mucha diferencia entre los clubes que ha estado?

La verdad es que no. Desde que salí de la Real he estado en equipos de Segunda B y el nivel es parecido. La diferencia que puede haber es cuando he estado en equipos de capital como Huesca, Leonesa y ahora el Lleida, que al ser capitales de provincia igual tienen más repercusión, pero en lo demás todo ha sido muy parecido.

¿Cómo es Lleida para vivir?

En invierno hace mucho frío, pero en lo demás me gusta. Es una ciudad muy industrial y siempre digo que se parece bastante a Irun. Me he amoldado muy bien a todo y la verdad es que estoy muy cómodo y a gusto viviendo aquí.

¿Cómo es que siendo de Irun no ha jugado nunca en el Real Unión?

Es una pregunta que me hace todo el mundo. El Real Unión y yo nos hemos movido casi siempre en una misma categoría y es cierto que no he jugado allí. No ha habido ninguna mala historia, ni nada, simplemente que no ha surgido ese momento. Yo desde que salí de la Real me marché fuera y solo regresé cuando el Barakaldo se interesó por mí. Todavía tengo cuerda para rato y a lo mejor tengo la oportunidad de jugar en el Real Unión. Pero, por ejemplo, tampoco he jugado en el Eibar, que también me preguntan por ello, pero es lo mismo, al final el futbolista se decide por el que le parece la mejor opción y no ha pasado nada más.