Declaran 18 de los 66 testigos, entre ellos, el marido y una amiga de Amaia Azkue
GARA | DONOSTIA
El Palacio de Justicia de la capital guipuzcoana acogió ayer, por segundo día consecutivo, el juicio por el caso de Amaia Azkue. Tal y como estaba previsto, testificaron el marido de la fallecida y allegados de la misma, entre las que se encuentra la amiga con la que tomó café el día en que se cometió el crimen. Esta persona fue la última que la vio con vida -salvo su agresor-, dado que horas después hallaron su cadáver en el embalse de Ibai Eder, en Nuarbe.
El juicio se está celebrando a puerta cerrada porque cuando acontecieron los echos, el 16 de marzo de 2011, el acusado era aún menor de edad. El hecho de que la vista no sea pública hace que la información procedente de la sala sea muy escasa. En palabras de Miguel Castells, abogado de la acusación, recogidas por Urola Kostako Hitza en su edición digital, será la autopsia de la víctima la prueba principal en el juicio en el que, por ahora, han declarado 18 de los 66 testigos. Según el letrado, durante el proceso se presentarán ocho pruebas. Añadió que los abogados realizarán el informe el viernes.
Si todo se desarrolla sobre lo previsto, el juicio terminará el lunes 19.
Mientras, el abogado de la defensa, Joanes Labaien, dijo ayer que el joven acusado «es inocente hasta que se demuestre lo contrario».
La Coordinadora Feminista de Urola Kosta, por su parte, ha llamado a participar en las movilizaciones que han convocado para el viernes en las principales localidades de la comarca, cuando se cumple el primer aniversario de la muerte de Azkue.