Tras las informaciones aparecidas en la mañana de ayer en varios medios, tanto la entidad catalana Caixabank como Banca Cívica, fruto de la fusión entre Caja Navarra, CajaCanarias, Caja Burgos y Cajasol, remitieron sendos comunicados a la CNMV en los que informaban de que «La Caixa y Caixabank están analizando diferentes opciones de integración, entre las que se encuentra, en proceso de due diligence, la de Banca Cívica».

Según Caixabank, «las operaciones se encuentran en fase de estudio, sin que se haya llegado a ninguna concreción, especialmente en cuanto a la valoración de las compañías, y sin que se haya tomado decisión alguna al respecto por los respectivos órganos de Gobierno».

Hace dos semanas, los copresidentes de Banca Cívica, Enrique Goñi y Antonio Pulido, reconocieron que estaban negociando «con todos» una posible fusión, lo que le permitiría dilatar en dos años el impacto del saneamiento financiero que impone el Gobierno.

En el sector se da por seguro que Banca Cívica no podrá afrontar en un solo año el saneamiento de 2.031 millones que le exige la reforma financiera y que está abocada por tanto a una fusión.

Una circular reciente del Banco de España especifica que para casos como el de Banca Cívica, que acometió su fusión antes del 1 de septiembre pasado, las provisiones deben salir de su cuenta de resultados, es decir, de sus beneficios, y no de su patrimonio.

Con un nivel de beneficio neto como el obtenido al cierre de 2011, 183 millones de euros, la entidad entraría en pérdidas este año, según expertos consultados por la agencia Efe.

En el caso de La Caixa y Caixabank, el impacto del saneamiento que debe acometer al hilo de la reforma financiera es de unos 4.000 millones, aunque ya solo le quedan pendientes unos 600.

De llegar a un acuerdo, la entidad resultante se convertiría en la tercera entidad del Estado por volumen de activos y tendría una capitalización bursátil de aproximadamente 13.700 millones de euros, en la cual los accionistas de Banca Cívica tendrían prácticamente el 9%.

Respuesta en Bolsa

Poco después de confirmarse las negociaciones, Banca Cívica lograba una revalorización del 4,18%, aunque al cierre de la sesión cayeron un -1,12%, hasta 2,29 euros. Por el contrario, Caixabank, que inició la jornada con una evolución más discreta, terminó la jornada con un incremento del 2,02%, hasta los 3,33 euros.