Presos políticos colombianos inician una huelga de hambre indefinida
GARA | BOGOTÁ
El Colectivo de Presos Políticos y Prioneros de Guerra Antonio Nariño de Colombia inició ayer una de huelga de hambre indefinida en once cárceles del país para exigirle al presidente, Juan Manuel Santos, que autorice la visita de una Comisión Internacional de Observación de la situación de los prisioneros, anunciada por el grupo Mujeres Gestoras del Mundo por la Paz y autorizada en un primer momento por el ministro de Justicia, Juan Carlos Esguerra.
Con esta protesta quieren, además, rechazar las declaraciones de Esguerra, que negó la existencia de presos políticos en Colombia y rechazó que se encuentren una situación de mayor vulnerabilidad.
«Lo que no dice el señor ministro es que, jurídicamente, sí existimos, pues en las leyes punitivas del Estado se sigue juzgando a los presos de la insurgencia por el delito político de rebelión», subraya en un comunicado. «Si el Gobierno está convencido de buscar una salida dialogada al conflicto, debe hacer un gesto recíproco que anime a las partes a continuar aportándole a esta iniciativa. Una debe ser la de reconocer el conflicto social y armado y, al mismo tiempo, la existencia de presos políticos y prisioneros de guerra, y permitir la verificación propuesta por Colombianos y Colombianas por la Paz. Es contradictorio que un gobierno que se ufana de ser democrático niegue tal verificación, lo que deja ver que algo teme», añade.
La visita de esta comisión es una de las exigencias de las FARC para proceder a la entrega de los once uniformados que mantiene en su poder. El Gobierno se niega alegando que tal petición no forma parte de los protocolos aprobados por ambas partes.