Los hoteles de Gipuzkoa registran hasta el momento un nivel de reservas cercano al 65% para esta Semana Santa, similar al de otros años por estas fechas, y esperan repetir los resultados de ejercicios anteriores, que rondan el 84% de ocupación media, según declaró ayer el presidente de la Asociación de Empresas Hoteleras de Gipuzkoa (Aspagi), Fran González, en una entrevista concedida a Efe.

El volumen de reservas que se registra hasta ahora, precisó, «está dentro de los parámetros normales para estas fechas», por lo que el gremio de hoteleros confía en cumplir las previsiones y obtener resultados similares a otros años.

Además, señaló que el ritmo de las reservas presenta «altibajos» porque los clientes «reservan y anulan», a veces por el lanzamiento de promociones, aunque «la tónica general de los últimos años», motivada a su juicio por la crisis, es que «cada vez se espera más al último momento por si salen ofertas».

Entrando en cifras, las previsiones que se manejan en el sector revelan un índice de ocupación del 80% el jueves, del 90-95% el viernes y sábado, y del 70% el domingo, lo que ofrece una media cercana al 84% en estos cuatro días festivos para el total de las aproximadamente 8.000 plazas de hoteles y pensiones de que dispone Gipuzkoa, en torno a la mitad de ellas en Donostia.

Sobre la situación del sector, el presidente de Aspagi dijo que «lo que más preocupa» a los hoteleros es «el descenso del precio medio» por habitación, con «unas tarifas congeladas desde 2009». «Para lograr la misma ocupación que antes estamos bajando los precios», y «mantenemos las ofertas cada vez más tiempo», indicó, para añadir que esta Semana Santa dormir en un hotel guipuzcoano cuesta un 10% menos de media que el año pasado.

La temporada alta se mantiene

Los datos aportados por González llegan aún con la polémica sobre los índices del turismo en la capital guipuzcoana fresca en la memoria, después de que el PSE en el Ayuntamiento donostiarra señalara directamente a Bildu como causante directo de un descenso sobre el que tampoco hay coincidencia en los datos exactos.

A esta alarma también se refirió Fran González, quien consideró que se trata de una riña «meramente política» que se teme que «al final nos salpicará a todos».

Aunque reconoció que algunas cifras han descendido, remarcó que se trata de números que afectan a la temporada baja y eso, en su opinión, eso «es normal en los tiempos que corren», porque en esas partes del año el sector se nutre sobre todo de «clientes de empresa» que, «con la crisis y los recortes, cuando menos, han acortado la duración de sus reuniones».

«Esperamos que el turismo vacacional, el de la temporada alta, no nos falle, porque es la base de nuestro negocio», dijo el responsable de Aspagi.