Trabajadoras de Indusal se concentraron ayer ante las puertas del Hotel Gran Domine Bilbao, que es cliente de la empresa de Arrigorriaga, para denunciar los «despidos encubiertos» que ha aplicado la dirección contra 23 trabajadoras que en 2008 mantuvieron un pulso contra la empresa por la discriminación por razones de sexo.

La huelga de mes y medio terminó con un acuerdo en el que se mejoraron las condiciones de trabajo y salariales, pero «la empresa no se ha olvidado y utiliza la represalia y el castigo como una vía directa para expulsar de la empresa a las trabajadoras que se enfrentaron a esa discriminación por razón de sexo», explicó el responsable sindical de LAB, Juankar Vizan.

Indusal cuenta con 42 plantas en el Estado español y se dedica a la limpieza de sábanas y manteles de hoteles, centros sanitarios y hospitales. La planta de Arrigorriaga tiene en su cartera a 30 hoteles. La dirección de la empresa presentó en un primer momento un expediente de extinción de empleo para 25 trabajadores, pero el Ejecutivo de Gasteiz, al igual que LAB, no encontró motivos reales para los despidos. Más tarde «por razones productivas» la dirección propuso a 23 trabajadoras el traslado a otras plantas de Indusal de Huelva, Córdoba y Guadalajara. El próximo 24 de abril se cumple el plazo de contestación de las afectadas.

Vizan, responsable de LAB en esa comarca, explicó a GARA que «en la empresa hay mucho miedo, porque ese traslado colectivo que ha planteado está injustificado y está claro que se han disfrazado los despidos como castigo contra las trabajadoras que hace cuatro años se enfrentaron a la empresa por la discriminación por razón de sexo, que fue ratificada por la Inspección de Trabajo y la Defensoría de la Mujer, pero la dirección de Indusal no se olvidó y ahora les castiga».

Por eso, el sindicalista de LAB destacó que «las trabajadoras afectadas en 2008 sabían pelear y lo hicieron, y en 2012 saben hacerlo. Vamos a pelear por nuestros puestos de trabajo», precisó Vizan. Tras estos días festivos de Semana Santa, las trabajadoras se van a concentrar en un local de Arrigorriaga para denunciar «la represión empresarial» y poner de relieve que «esta empresa no tiene problemas económicos, «lo que ocurre es que no quiere que nadie les frene sus ansias de explotación laboral y salarial».

LAB recuerda en este caso que sólo el 32% de la plantilla de Indusal participó en la huelga de 2008, sin embargo, en el ERE se ha incluido al 84% de aquellas que lucharon por la igualdad salarial y laboral.

USO ha aprobado los planes de la empresa, lo que para LAB es una decisión «controvertida y que sólo busca aprovecharse de una situación para mantener y perpetuar su representación».

Las trabajadoras señalaron ante el Hotel Gran Domine Bilbao que seguirán «denunciando esta agresión hasta conseguir que se pare».