La dirección de Indusal, empresa de lavandería ubicada en Arrigorriaga, ha iniciado, con el apoyo de USO, una recogida de firmas entre la plantilla en contra de las 23 trabajadoras a las que obliga al traslado forzoso a las plantas de Huelva, Córdoba, Pontevedra, Guadalajara y Valencia, según explicaron ayer a las puertas del Hotel Barceló-Nervión las afectadas por «estos despidos de facto».

Ante el hotel denunciaron que el problema se remonta «a 2008, cuando a instancias de LAB reclamamos la equiparación salarial y laboral con los hombres. Eso molestó a la dirección que estaba acostumbrada a hacer lo que quiere. Tras la huelga de 45 días, conseguimos mejoras». En cuanto Indusal ha podido, «nos plantea esa salida de los traslados, como venganza y represalia por nuestra actitud. Para ello, ha contado con el apoyo de USO, lo que es incomprensible a nivel sindical».

Ayer, ante el Barceló-Nervión, dijeron que mantendrán la denuncia en la calle ante los clientes de Indusal para que conozcan «que nos echan porque no aceptamos la discriminación de las mujeres».