Las Cajas de la Federación Vasco Navarra perdieron empleo y depósitos desde 2008
La memoria de la Federación de Cajas de Ahorros Vasco-Navarras de 2011 muestra una pérdida de depósitos desde el 2008, aunque el beneficio económico se ha mantenido en alza, a pesar de que no ofrecen el dato comparativo de los últimos diez años.
Juanjo BASTERRA
La Federación de Cajas de Ahorros Vasco-Navarras ha publicado la memoria de 2011 con la idea de que será la última, porque en la práctica no existía, pero tras la compra de Banca Cívica por CaixaBank ha quedado engullida de forma definitiva. En la memoria, que firma Mario Fernández, presidente de Kutxabank, se explican los pasos que han dado en el nuevo escenario «para reforzar su posición competitiva en el sistema financiero español y garantizar el mantenimiento de la obra social». Sin embargo, Caja Navarra ha sido engullida por la catalana, y las vascas se han integrado en un banco, tras la compra por parte de BBK de Caja Sur. Además, se mantiene el espíritu de duplicar el valor patrimonial de Kutxabank con otra adquisición. A Fernández le queda la apuesta por Catalunya Caixa, pero hay muchos pretendientes porque el sistema financiero ya se ha estrechado mucho, ya que hace unos días el gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, ya explicó que ya se han retirado del sistema «las entidades más débiles. Hasta diciembre pasado habían desaparecido dos bancos y 28 cajas por procesos de integración y cabe que se produzca alguna integración más en los próximos meses», precisó.
La memoria de la Federación de Cajas de Ahorros Vasco-Navarras pone al descubierto una caída importante de depósitos de la clientela desde 2008. Así, las cuatro cajas (BBK, Vital, Kutxa y Caja Navarra) controlaban en 2004 un total de 34.836 millones en depósitos de la clientela. Alcanzaron los 59.826 millones en 2008, cuando estalló la crisis de forma definitiva, y a 2010 bajaron a 54.504 millones, un 8,9% menos en tres ejercicios. Datos de 2011 de la navarra no existen, por lo que si comparamos las tres, lo que es Kutxabank, en cuatro años (2008 a 2011) han perdido un 13,15% en depósitos.
En 2011, como explica la memoria de las cajas vasco-navarras, han perdido 238 millones en fondos de inversión, una caída del 5,4%, hasta los 4.198 millones y, sin embargo, los fondos de las entidades de previsión social voluntaria (EPSV) crecieron hasta los 4.868 millones, un 4,3% más que en 2010.
Sobre la inversión inmobiliaria, aunque no dan datos concretos, reconocen que están atrapados por la burbuja, porque «el exceso de oferta de viviendas no usadas, por un lado, la acumulación de los activos inmobiliarios en los balances de las entidades financieras, con precios de inmuebles en libros superiores a los de mercado por otro, han sido también elementos esenciales que han incidido en la gestación de la crisis actual». Las cajas vascas (Kutxabank) financiaron 44.419 millones, según explica, 571 millones menos que un año antes.
Beneficio para la obra social
Las tres cajas vascas cerraron 2011 con un beneficio neto de 224.076 millones, según la memoria de la Federación, puesto que las tres ofrecieron por separado una cantidad que suma 245,15 millones, pero habían destinado a provisiones 428,9 millones. Por lo tanto, el compromiso que cita Mario Fernández para llevar el 30% del beneficio neto a la obra social es ficticio en la realidad con ese trasvase de dinero de un lado a otro. Pone de manifiesto una caída importante en la obra social. En este caso, en 1999 las cajas de la federación aportaban el 2,29 por mil del PIB y en 2011 se quedó en el 2,3 por mil en relación al PIB vasco, pero la riqueza casi se ha doblado en ese espacio de tiempo.
Así, aunque la crisis económica se nota y reduce la actividad, las cajas entre una cosa y otra marcaron un récord en beneficios, aunque unos se guardan en la caja fuerte por si fallan la inversión inmobiliaria. También hay que tener en cuenta en la reducción del patrimonio de las cajas. Al beneficio contribuyó que las cajas cobraron 284,1 millones en comisiones, un 3,7% más que un año antes.
Las cajas de la Federación vasco-navarra de 2004 a 2010 aumentaron en empleados, al pasado de 6.457 a 7.330 en 2010, pero con las operaciones actuales de integración han perdido ese incremento que se produjo. Si se compara esa evolución desde 2008, las entidades que componen Kutxabank desde perdieron un 10,89% de puestos de trabajo, de 6.078 a 5.416 empleados.