La Amstel Gold Race dará hoy comienzo al tríptico de las Ardenas. Y lo hará con la mira puesta en el próximo sucesor de Philippe Gilbert (BMC), ganador las dos últimas ediciones en la carrera de la cerveza. No es que el belga no vaya a participar en la prueba, pero el bajo rendimiento del especialista clasicómano en este arranque de la temporada lo descarta prácticamente por la lucha final de esta carrera que cumple 47 años de historia.

Gilbert cuajó una campaña sensacional en 2011, llevándose hasta 17 triunfos, incluida la Clásica de Donostia y una etapa del Tour, lo que le llevaron al número uno mundial. Sin embargo, este año está inédito. «Varios contratiempos alteraron mi comienzo de temporada», declaraba el corredor en la previa. De hecho, uno de esos problemas se debe a una infección dental que sufrió a principios de marzo. Sin embargo, el belga no se rinde y señaló que «he continuado trabajando y mi mejor forma va a volver algún día».

Así las cosas, hombres como Alejandro Valverde (Movistar), Joaquim Rodríguez (Katusha) o Samuel Sánchez (Euskaltel) quieren coger el testigo del corredor nacido en Verviers y llevarse el triunfo en esta prueba que cuenta con 256,5 kilómetros entre Maastricht y Valkenburg y que servirá de ensayo para el próximo Mundial de ciclismo.

El equipo Euskaltel arropará a Samuel Sánchez con Egoi Martínez, Rubén Pérez, Jorge Azanza, Romain Sicard, Gorka Izagirre, Peio Bilbao y Ricardo García.

El Movistar tendrá la baza de Valverde, quien, después de haber estado dos años sancionado, ha vuelto muy fuerte, ganando una etapa en el Tour Down Under, otra en la París-Niza y adjudicándose la Vuelta a Andalucía. El iruindarra Imanol Erviti intentará ayudar a su jefe de filas, como también lo hará el navarro Xabier Zandio en el equipo Sky con Edvald Boasson Hagen.

Evans y los Schleck se prueban

No faltará a la cita el australiano Cadel Evans, vencedor del Tour 2011. Aunque el aussie ya ha dejado claro que su objetivo es «ayudar a los compañeros». Eso no quiere decir que no vaya a pelear por la victoria algún año. «La Amstel Gold Race es una clásica que se adapta bien a mis características. Algún día puedo ganarla, pero no será este domingo (por hoy)», recalcó.

Además de los mencionados ciclistas, aprovecharán la Amstel Gold Race para probarse los hermanos luxemburgueses Andy y Frank Schleck (RadioShack), el dúo del Liquigas compuesto por Vincenzo Nibali y Peter Sagan, así como el francés Sylvain Chavanel (Omega) y la pareja fuerte del Rabobank: Rober Gesink y Bauke Mollema.

El recorrido está salpicado por 31 cotas, concentradas en mayor número en el tramo final, pero no será la única dificultad para los corredores de los 24 equipos participantes, ya que deberán superar las peculiaridades de las carreteras holandesas, plagadas de curvas, rotondas, isletas y tramos de calzadas estrechas que facilitan las caídas.

El punto clave estará en los últimos veinte kilómetros, en los que se suceden cinco subidas con final en el Cauberg, que tiene 700 metros de longitud con pendiente de hasta el 17%, y que decidirá en vencedor y al hombre que se llevará 80 puntos UCI y 16.000 euros de premio.

Antes, en el Keutenbergm, la cota más dura con desniveles del 22%, se hará la selección de los hombres que van a aspirar al título. Allí lo intentó, sin suerte, Purito Rodríguez la pasada temporada, la que ganó Gilbert.