Se jugará finalmente, pero el derbi de este próximo sábado entre Anaitasuna y San Antonio ha estado pendiente de un hilo. La difícil situación económica por la que pasan los jugadores albiazules provocó que se plantease la posibilidad de hacer huelga coincidiendo con el partido para que tuviese «una mayor repercusión», explicó uno de los capitanes, Víctor Álvarez, en declaraciones a EFE.

Sin embargo, la plantilla antoniana decidió posponer tal medida de fuerza «por respeto a ambas aficiones», ya que no descartan «hacerla más adelante». El San Antonio recibió la semana pasada 100.000 euros de subvención por parte del Gobierno de Nafarroa, con la que «nos pagaron las mensualidades de febrero y marzo».

«Nos habían dicho que también nos pagarían gran parte de la deuda de contratos de imagen que, según los casos, oscila entre los 7 y 9 pagos, y que en junio solo nos deberían dos contratos de imagen, pero no ha sido así. Nos sentimos defraudados y engañados», criticó el central asturiano.

Víctor Álvarez aseguró que, tras este pago, «por lo menos, ahora estamos un poco más tranquilos, pues nos ayuda a salir de los números rojos y ponernos al día con algunas deudas, pero nuestro enfado es que nos mintieron desde el principio», censuró. «Es triste tener que hacer un plante o pensar en una huelga porque da muy mala imgen al club, pero no nos dejan otra opción. Si no hacemos huelga en el derbi, la haremos en otra jornada para poder reivindicar lo que nos merecemos», insistió.

Vicente: «Seguiremos en Asobal»

El presidente del club, Doroteo Vicente, explicó a esta misma agencia que «hacer una huelga, aparte de una pena, sería un toque muy negativo para todos» y avanzó que «las situaciones ahora cambian por momentos. Estamos hablando con 25 o 30 empresas y solo hace falta que con el trabajo algo salga para poder pagarles».

«Quiero transmitirles ilusión y que por nosotros no va a quedar, ya que también hemos adelantado dinero. Ahora somos un vehículo publicitario perfecto y hago un llamamiento a las empresas para ayudar a uno de los clubes históricos», solicitó el máximo dirigente antoniano.

Pese a la complicada situación económica, Vicente confió en la viabilidad del proyecto y «en que no haya problemas para seguir en Asobal», aunque sí es muy probable que más de uno de los pesos pesados del equipo haga las maletas al final de la presente temporada.