El PP tilda de «coacción» el manifiesto de Madrid y finge hacer movimientos
El manifiesto firmado por más de 500 personalidades y profesionales de Madrid instando al Gobierno español a avanzar por la vía de Aiete ha aumentado el nerviosismo del Gabinete Rajoy, que lo tilda incluso de «coacción». El PP intenta vender como movimientos la propuesta de libertad para un preso de Langraiz del que se remarca su «arrepentimiento» y la disposición a cambiar la política carcelaria solo si ETA se disuelve, lo que escenificará hoy en Donostia.
Ramón SOLA | DONOSTIA
El Gobierno español ha reflejado su incomodidad tras la primera gran iniciativa por un proceso de solución surgida en su ámbito territorial, Madrid, y que lleva la firma de centenares de profesionales reputados de distintas áreas. Tras hacerse público el manifiesto ``Madrid-Donostia'', que respalda la vía de la Declaración de Aiete, la respuesta corrió a cargo del secretario de Estado de Seguridad, lo que también resultó significativo.
Tras recurrir a la fórmula habitual de esquivar la cuestión negando que hayan recibido el texto («no me consta»), Ignacio Ulloa añadió que pedir al Ejecutivo que abra un diálogo con ETA debe entenderse también como «una coacción» por parte de los firmantes.
En una entrevista en ABC Punto Radio, el representante gubernamental esgrimió que «me consta que hay muchos grupos en torno a la izquierda abertzale que estarían encantados de que se produjera ese diálogo, pero el Gobierno y el Ministerio del Interior lo que hacen es ajustarse a la ley».
«La legislación está clara y, si el pueblo y el legislador la modifica, entonces el Gobierno se sujetará a esa nueva ley, pero de momento es la que hay y es la que hay que aplicar», zanjó.
En un momento en que aumenta la presión social coincidiendo con el sexto mes desde la declaración de ETA, el Gobierno español intentó presentar ayer como un movimiento de calado la primera petición de libertad para un preso de Langraiz. Se trata de José Manuel Fernández de Nanclares, que en realidad debía estar libre hace meses por haber superado los tres cuartos de condena y del que Moncloa remarca que «se ha arrepentido».
Además, el PP vasco realizará hoy un acto en el Kursaal en el que intentará presentar como un giro significativo la idea de que la política carcelaria cambiaría si ETA se disolviera.
En el día en que se cumplían seis meses desde la decisión de ETA, la izquierda abertzale emitió una nota relativa al documento «Madrid-Donostia. Paz y democracia para el País Vasco» en la que «aplaude el compromiso con la paz de los más de 500 firmantes».
En unas declaraciones realizadas por Maribi Ugarteburu para hacer balance del momento actual, la izquierda abertzale constata que el PP sigue anclado por su «miedo atroz» a que el escenario político se abra y, por su parte, anuncia que responderá «con más proceso a la voluntad permanente de boicot del Estado, desde el esquema de acumulación de fuerzas y la movilización popular. Día a día demostraremos al Estado que cada vez somos más los que apostamos por las soluciones y por hacer frente al inmovilismo y la política represiva del Estado. Esa actitud y apuesta es la que ha permitido abrir un nuevo tiempo y será también la que posibilite construir un escenario de soluciones».
La izquierda abertzale recuerda que «a lo largo de estos seis meses Euskal Herria ha avanzado en el camino de las soluciones, gracias al empuje de la sociedad vasca y la comunidad internacional».
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, confirmó ayer su paulatino distanciamiento de la hoja de ruta de Aiete al volver a emplazar a la izquierda abertzale para que continúe haciendo movimientos unilaterales, mientras se muestra menos exigente respecto al Gobierno del PP, al que le correspondería cumplimentar ahora el segundo punto de la declaración de la Casa de la Paz.
Urkullu apeló a «principios éticos» para remarcar que ETA tiene que disolverse sin más, todo ello en una entrevista concedida a Punto Radio. También se dirigió a la izquierda abertzale para pedirle «valentía para dar pasos» y «que siga su proceso unilateral, como ellos mismos lo llaman».
En cuanto al Gobierno de Mariano Rajoy, el líder del PNV le reclama únicamente que «atienda al contexto y sepa gestionarlo».
El líder jeltzale se dirigió además a la opinión pública para trasladar la idea de que, si bien los seis meses transcurridos desde la decisión de ETA en octubre le parecen esperanzadores, llegar al final de la organización armada «resultará complejo» porque «una lacra de tantos años no se resuelve de la noche a la mañana».