Triunfo ante UCAM Murcia
Brad Oleson y Lampe, los brotes verdes de un otoñal encuentro
La escuadra gasteiztarra se complicó la vida tras un muy buen arranque, hasta el punto de ver cómo su rival se ponía 65-63 a falta de tres minutos. Un parcial final de 6-2 pudo arreglar el desaguisado.
CAJA LABORAL BASKONIA 71
UCAM MURCIA 65
Arnaitz GORRITI
Es extraña la percepción humana. Lo cierto es que el UCAM Murcia amenazó muy seriamente la victoria baskonista en unos últimos minutos realmente horribles del Caja Laboral Baskonia, pero en ningún momento dio la impresión de que los de Dusko Ivanovic pudieran perder. Quizá por eso, incluso cuando el marcador mostraba un apretado 65-63, el Buesa Arena no se inquietó y el propio Baskonia, como quien se despierta de la siesta, cerró el duelo con un parcial de 6-2.
Lampe y Oleson fueron los brotes verdes de un Baskonia otoñal, que debe mejorar sobremanera, y que vio cómo jugadores como Heurtel -4 minutos-, Nemanja Bjelica -9 minutos- y Nocioni -8 minutos por culpa de las faltas- casi no jugaron. Mientras, un dolorido Prigioni, que quizá cause baja en Barcelona, dispuso de 36 minutos -tal vez porque jugó a buen nivel-.
A golpe de triple -siete de sus nueve en los diez minutos iniciales, para luego firmar un 2 de 16-, y a golpe de Brad Oleson, que anotó sus cuatro primeros intentos desde más allá de los 6,75 metros, el Caja Laboral Baskonia no precisó apretar en exceso el acelerador para descolgar al conjunto pimentonero. Jugando sencillo, metiendo balones adentro para luego poder doblar a los tiradores, el Baskonia no hallaba excesiva resistencia en la defensa rival, que encajó la friolera de 29 puntos en el primer cuarto, y más que hubieran sido de haber encestado San Emeterio los lanzamientos de los que dispuso.
Cada vez peor
Pero lo que parecía una paliza unilateral, se torció. El UCAM Murcia encontró en Miso el director que precisaba y Ribas -muy defendido por Ivanovic en sala de prensa- no mantenía el ritmo del alaskeño. Además, Nocioni se cargaba de faltas. Por fortuna, el catalán encontró el modo de surtir de balones a Lampe, y gracias al polaco, el Baskonia se mantuvo en cabeza al descanso, 39-35.
Oleson volvió a emerger tras el receso -fue el «asesino» que Ivanovic quiere que sea- para abrir brecha de nuevo -y más que pudo aumentar si Milko Bjelica no hubiera errado dos bandejas a 10 centímetros del aro-, pero se apagó en el cuarto final. El Murcia ahogó a un Prigioni cansado y gracias a los triples de Barlow y Grimau, puso el triunfo local en solfa.
Por fortuna, tras el pertinente tiempo muerto de Ivanovic, Lampe y Prigioni aparecieron con tres canastas claves para deshacer el entuerto.
Ivanovic no hizo ninguna valoración. Lo que sí hizo fue, a las preguntas sobre el ostracismo de varios jugadores, no cortarse ni un pelo. «Algunos hombres tuvieron que jugar más minutos, porque con otros no podíamos ganar», declaró.
En ese sentido, añadió que «Pablo -Prigioni- va a parar unos días y a ver si puede mejorar. Creo que podemos jugar bien sin él». No especificó, empero, si podrá jugar o no en el Palau Blaugrana el jueves.
Sobre Heurtel, Ivanovic aseguró tener «mucha confianza. ¿Te parece raro? -retó a un periodista- Si no la tuviera, no estaría en el equipo. Pero debe dar no uno, sino cinco pasos más. Con él en la cancha, el nivel debe subir, no bajar», añadió.
En el último momento, el preparador gasteiztarra tuvo un leve encontronazo con un periodista que criticó a un gris Teletovic y a Pau Ribas. «Estás cuestionando a dos jugadores que lo dan todo. A esos los defenderé siempre», culminó, tajante.
Acerca del juego exhibido, dijo que fue «muy parecido al exhibido durante todo el año. Cuando hemos atacado bien, defendimos mal; cuando hemos atacado peor, defendimos bastante mejor». A. G.
