Visita esta noche El Madrigal
A pasitos cortos para alcanzar un propósito mayúsculo
Los rojillos comienzan ante el Villarreal, un equipo que lucha por la permanencia, la fase de dos encuentros seguidos fuera de casa.
Imanol CARRILLO
Existen dos formas de alcanzar los objetivos. Una es hacerlo a grandes zancadas, y la otra, pasito a pasito. Este segundo método es el utilizado esta temporada por Osasuna para intentar alcanzar puestos europeos. Y este fin de semana puede ser clave por diferentes motivos.
La expedición rojilla, que realizará una mini-concentración en El Saler coincidiendo con la cita liguera de hoy en Vila-real y la del próximo miércoles en Valencia, tiene a tiro la zona de la Europa League, y una victoria en El Madrigal facilitaría el objetivo. Y es que la jornada enfrenta a equipos que tienen metas opuestas, y entre ellos se encuentran rivales directos del conjunto navarro por Europa.
Sería importante que los hombres de José Luis Mendilibar lograsen resultados positivos en las dos próximas salidas. No lo tendrán nada fácil, porque el Villarreal se está jugando la permanencia y el Valencia de Unai Emery, además de querer mantener la tercera posición de la clasificación liguera, querrá complacer a su exigente afición tras la eliminación en las semifinales de la Europa League.
Pero, como dijo ayer Mendilibar, «primero hay que pensar en el Villarreal». Para la cita de esta noche, los rojillos recuperan a dos efectivos de gran importancia como son Raúl García, que vuelve tras cumplir sanción, e Ibrahima, que regresa a Osasuna después de clasificar a Senegal para los Juegos Olímpicos. El centrocampista navarro saldrá desde el inicio, mientras que el africano deberá esperar su turno en el banquillo.
Tranquilo ante las ausencias
Más problemas tendrá el técnico vizcaino para confeccionar la línea defensiva, ya que Sergio y Miguel Flaño, a pesar de que también han viajado con la expedición, no se han recuperado de sus respectivas dolencias.
Ante estas ausencias, más las de Masoud, Echaide y Sola, Mendilibar se mostró tranquilo: «Estamos acostumbrados a los problemillas. El que salga lo hará bien. A lo largo de la temporada hemos tenido problemas atrás y los hemos sabido solventar».
El de Zaldibar no quiso hablar de las opciones matemáticas para entrar en Europa y recalcó que «podemos hacer cuentas a la vuelta, pero no antes. Además, por la inseguridad de todos los equipos involucrados en la lucha por Europa, no creo que perdiendo nos quedemos descolgados. Aunque nosotros estamos ahí, y pelearemos por estar en Europa», sentenció.
Respecto a las sensaciones que le ha transmitido la plantilla, el vizcaino indicó que «hemos entrenado bien, con chispa, pero luego tienes a once tíos enfrente. Espero poder hacerles frente, espero apretarles arriba y estar más tiempo en campo contrario que en el propio».
Las comparaciones suelen ser odiosas. Pero, la verdad es que El Madrigal y El Sadar son dos estadios de fútbol que guardan varias similitudes entre sí. Las medidas de ambos campos son muy parecidas (105x68 metros el castellonés y 104x66 metros el iruindarra). Además, si el del submarino amarillo tiene un aforo de 25.000 espectadores, el rojillo cuenta con una capacidad para alrededor de 20.000 aficionados.
Los dos estadios son perfectos para hacer presión sobre los jugadores. Y a ello se aferra el Villarreal, que pretende reunir al menos 20.000 aficionados en El Madrigal para apoyar al equipo amarillo. Para ello, ha movilizado a toda su masa social y ha puesto precios accesibles.
Miguel Ángel Lotina no podrá contar con ninguno de sus dos laterales izquierdos, ya que Oriol está lesionado y Catalá sancionado. Así, será el canterano Jaume Costa, que ya jugó en Zaragoza, el que entre en el equipo titular. El vizcaino recalcó que «no estoy pendiente de los rivales. No quiero perder ni un gramo de energía mirando lo que hacen los demás. No puedo hacer nada y prefiero estar centrado en lo nuestro». I.C.