La secretaria estadounidense, Hillary Clinton, afirmó ayer que estaba «satisfecha» por la forma en que se acogió al abogado chino Chen Guangcheng en la Embajada norteamericana en Pekín, ya que «refleja su elección» y los «valores» de Estados Unidos e insistió en que su país mantendría su compromiso tanto con él como con sus allegados en adelante.

Ante estas declaraciones, el portavoz de la cancillería china, Liu Weimin, exigió a EEUU a dejar de «engañar a la opinión pública» sobre el caso de Chen Guangcheng y que dejara de «buscar por todos los medios ocultar su responsabilidad en este asunto» y culpar a los demás.

China también exigió disculpas por haber permitido entrar en la embajada al abogado ciego de forma irregular, que se escapó de su casa el 22 de abril después de pasar más de un año y medio confinado bajo arresto domiciliario.

Chen abandonó ayer la Embajada de Estados Unidos en Pekín después de permanecer en ella seis días. Clinton aseguró que el abogado «ha llegado a varios acuerdos con el Gobierno chino sobre su futuro, como que tenga la oportunidad de continuar con su formación en un entorno seguro» y que su intención, desde un princípio fue «residir en China».

Sin embargo, los allegados del abogado explicaron ayer que Chen Guangcheng dejó la embajada de los Estados Unidos bajo amenazas de represalias contra sus allegados y no «por su propia voluntad» como afirmó el gobierno chino..

La confirmación oficial de su refugió en la Embajada estadounidense se produjo el mismo día en que Clinton llegó a la capital china para celebrar un Diálogo Estratégico y Económico con las autoridades chinas.