El conflicto generado en el seno del sector de producción de leche ovina de Ipar Euskal Herria sigue sin tener visos de solución. Hace unos días, el Ministerio francés de Agricultura aceptaba la demanda de Patrick Etchegaray, presidente de la Interprofesión (estructura en la que están representados los productores, las cooperativas y los industriales) y anunciaba que había nombrado a un mediador oficial para intentar buscar una solución a la crisis, cuyo desencadenante fue la negativa el pasado mes de diciembre de los empresarios transformadores a recolectar la producción de la cooperativa CLPB.

ELB volvió a denunciar ayer, en Baiona, «la agresión en toda regla por parte de los industriales contra la que la Interprofesión y, en particular, Etchegaray no han hecho nada más que apelar a un mediador parisino, justo antes de dejar su cargo».

«Esperábamos que en los dos años en los que le correspondía presidir la Interprofesión trabajaría en pro de los intereses de los productores, ya que lo hacía en representación del Colegio de Productores pero ha sido lo contrario puesto que jamás antes había habido tantas regresiones» manifestó Xabi Lopepe.

El sindicato de agricultores vascos también refutó las acusaciones de «bloqueo» vertidas en su contra por FDSEA -grupo más importante en el seno de la Interprofesión- y criticó la indiferencia mostrada por la Cámara de Agricultura de Pau.

Tras recordar que «ELB no puede bloquear nada porque es la FDSEA quien es mayoritaria en el Colegio de Productores», hicieron directamente responsable de la situación al sindicato mayoritario con quien en setiembre 2011 habían llegado a unos «acuerdos mínimos de los que dos meses más tarde renegó». «Lo único que ELB intenta bloquear es la supremacía de los industriales sobre el sector y, sobre todo, sobre los productores a quienes quieren someter a sus exigencias liberales» dijo Jean-Paul Duhalde.

Los miembros del sindicato vasco volvieron a subrayar la importancia del sector ovino «para hacer vivir a los productores -algo cada vez más difícil por los precios que se aplican- y para mantener vivos los espacios agrícolas y el tejido económico rural».

Por ello, consideran que es hora de «imponer un funcionamiento correcto de la Interprofesión» para lo que plantean diversas medidas prioritarias e invitan a la FDSEA a unirse a dichas reivindicaciones «en interés de todos y del futuro del sector de leche ovina».

Medidas prioritarias

En aras de garantizar un «funcionamiento correcto» de la Interprofesión, ELB propone, entre otras medidas, que el Colegio de Productores sea elegido democráticamente. En la actualidad, son las cooperativas lecheras las que nombran a los representantes de los productores y el sindicato considera que deberían ser elegidos por los propios productores.

Además, ante el peso que tienen los productores independientes -más de 400-, ELB propone la creación de un colegio específico de baserritarras productores de leche ovina. Otra propuesta es que la prioridad del sector sea «claramente» el desarrollo de la denominación de origen Ossau-Iraty por lo que la diferencia de precio aplicada a esta producción controlada y el resto sea mayor y se aplique efectivamente en todas las cooperativas. Además, exige que se priorice la leche autóctona antes de comprar la del exterior.