El pasado mes de marzo, en una convocatoria en Ficoba (Irun), al lado de la muga, electos de todos los territorios vascos y de diferentes siglas expresaban su voluntad común de reorganizar Udalbiltza. Se encuadran en la izquierda abertzale, AB, NaBai, Aralar, EA, Alternatiba, independentes... Fue un primer paso que tendrá continuidad antes de que acabe este curso político, y que preparará el terreno para la reactivación de Udalabiltza, probablemente antes de que concluya este año 2012.

La primera institución nacional vasca de la era moderna había quedado reducida a una mera referencia simbólica después de la operación policial realizada en 2003, con detenciones y cierres de sedes, que derivó en el juicio celebrado en 2010. El 20 de enero de 2011 la Audiencia Nacional daba a conocer la absolución, y con ello el levantamiento de las prohibiciones impuestas a su actividad.

Ha pasado casi año y medio y además el panorama político del país ha cambiado radicalmente, sobre todo por el cese definitivo de la lucha armada de ETA. En opinión de electos que impulsan esta reorganización, este nuevo escenario hace más necesaria la activación de Udalbiltza. Además, deja sin sentido la razón que allá por el año 2000, tras el final del proceso de Lizarra-Garazi, fue evocada sobre todo desde el PNV para que Udalbiltza se dividiera.

Así las cosas, tras la comparecencia de Ficoba, los alcaldes y concejales dispuestos a volver a poner en marcha Udalbiltza emprenderán esta semana la petición de adhesiones a esta iniciativa, que derivará luego en nuevos pasos, tanto antes del verano como después.

Su filosofía parte de la premisa de que en este nuevo tiempo político «y esperanzador» Udalbiltza es más necesaria todavía. Se recuerda que los cinco principios definidos en el Palacio Euskalduna en 1999 tienen plena vigencia en la medida en que Euskal Herria debe seguir reivindicándose como nación, también en el espacio internacional, donde hoy más ojos que entonces miran a este país. Y se añade que en 2012 aún es más perentorio avanzar hacia la soberanía dado el contexto económico, social, cultural...

Eudel y FNMC

La iniciativa se apoya igualmente en la constatación de que no existe ninguna institución similar a Udalbiltza, es decir, de carácter nacional y con esos principios y parámetros de trabajo, pese a que ya han pasado nueve años desde que se produjo el embate judicial.

En este punto, se subraya que ya está creada y «no hay que inventar nada», aunque sí consideran evidente que la institución debe ser reorganizada con nuevas ideas debido al tiempo transcurrido. Se plantea, por tanto, reorganizarla dando importancia a las aportaciones de los electos actuales y tras repasar los aciertos y errores de estos doce años de recorrido de Udalbiltza.

Las principales instituciones formadas por ayuntamientos que existen en la actualidad son Eudel en la CAV y la Federación de Municipios y Concejos en Nafarroa. Estos electos traen a colación que Udalbiltza es algo muy distinto por su alcance y por sus objetivos, aunque dejan claro también que la reorganización que plantean no busca crear una institución enfrentada a Eudel y la FNMC, ni tampoco aspira a sustituirlas.

El planteamiento para este relanzamiento resulta totalmente abierto, en correspondencia con un nuevo tiempo que permite afrontar el futuro desde otros parámetros. Así, la invitación a sumarse será trasladada a todos los electos de todos los ayuntamientos vascos -sean de la ideología que sean y se sientan vascos o, por contra, franceses o españoles-. Remarcan que las puertas están abiertas a todos y todas en la medida en que son electos de Euskal Herria.

Junto a todo ello, se destaca que una vez superadas las trabas judiciales-policiales y dada la nueva era política que acaba de iniciarse, «ya no hay ninguna razón para no impulsar la colaboración entre todos». El objetivo, que Udalbiltza recupere todo su pulso por encima de la ruptura política del 2000 y la ofensiva judicial del 2003.