GIRO Decimoséptima etapa
Purito gana y Hesjedal se revaloriza
El líder se impuso en la primera etapa dolomítica, pero el canadiense fue el más fuerte tras aguantar el ritmo agotador del Liquigas
Joseba ITURRIA
El líder del Giro, Joaquim Rodríguez, logró su segunda victoria en la primera etapa dolomítica con final en Cortina d'Ampezzo, pero el canadiense Ryder Hesjedal fue el vencedor moral. No solo aguantó el ritmo de los mejores en el Passo Giau, última cima puntuable. Atacó en la subida y en la bajada y reforzó su candidatura al triunfo con la ventaja para él de la crono final de 30 kilómetros de Milán.
La etapa estuvo marcada por el duro trabajo de desgaste al que sometió Liquigas a sus rivales y... al lanzador de Basso, Silverter Smyzd. Al equipo italiano se le fue la mano en el trabajo de tortura al que sometió al pelotón, sobre todo en los últimos puertos con Agnoli, Caruso y Cappechi. Pero agotaron a Smyzd y, cuando Cappechi acabó su trabajo en el inicio del passo Giau, Basso se quedó solo y sin fuerzas suficientes para seleccionar un grupo de hombres fuertes que se redujo a seis al aguantar al biganador del Giro Joaquim Rodríguez, Hesjedal, Scarponi, Urán y Pozzovivo.
El del Lampre dio muestras de debilidad en el último kilómetro del Passo Giau y sufrió calambres en la bajada, pero consiguió empalmar y salvó el día. Algo que no hizo Kreuziger, que sufrió una pájara que le hizo perder más de once minutos.
Buena etapa de los vascos
En el segundo grupo llegaron los dos vascos que pelean por el Top 10 de Milán. Intxausti ya es sexto en la general y Nieve está a apenas un minuto del noveno tras una etapa en la que pudo llegar con los mejores de no gastar fuerzas en su ataque del Passo Duran a 62 de meta.
Euskaltel no se conformó con la victoria de la víspera y buscó otra desde lejos, con Nieve, que fue lanzado por Amets Txurruka tras el gran trabajo previo de todo el equipo para impedir que la fuga de Serpa (Androni), Montaguti (Ag2R), Samoilau (Movistar), Rabottini (Farnese) y Seeldrayers (Astana) abriera hueco.
Pero Liquigas apenas le dejó atrapar un minuto de ventaja y Nieve desistió y se dejó atrapar por el grupo. Esas fuerzas perdidas en el ataque las echó en falta cuando estuvo muy cerca de empalmar con los mejores en el final del Passo Giau. Los tuvo a diez segundos, pero se le fueron y se tuvo que conformar con llegar en el segundo grupo. Hoy el Giro vive una jornada de transición antes de las dos etapas más duras de los Dolomitas.
Beñat Intxausti se mostró satisfecho tras ganar una plaza en la general y colocarse sexto y por afianzar el liderato en la general por equipos: «El balance tiene que ser bueno porque, aunque estamos más lejos de los primeros, subimos un puesto en la general y seguimos ahí, que es lo importante. En estas tres etapas hay que ir con mucha cabeza porque cualquier error de pasarte de ritmo, de no comer o no beber a tiempo, te puede arruinar todo el Giro».
Añadía que «la etapa se ha hecho muy dura porque no hemos parado en ningún momento. En el último puerto me he cebado un poco con el ritmo de los Liquigas y a cinco kilómetros de coronar se me ha encendido el chivato. Por suerte me he soltado a tiempo y luego ha venido Pardilla, que ha sido una ayuda importante porque, si te quedas solo ahí, sí que puedes explotar». GARA
