La juez que instruye el caso de Jon Anza cita por fin a la familia, tres años después
Maite UBIRIA |
Con tres años de retraso, la juez que instruye el caso de la muerte del refugiado vasco Jon Anza se ha puesto al fin en contacto con la familia. Myriam Viargues ha citado a sus allegados el próximo miércoles en el Juzgado de Toulouse. El pasado 18 de abril, cuando se cumplían justo tres años desde la desaparición del militante donostiarra, la familia había denunciado públicamente esta situación y había preguntado si acaso «la Justicia francesa quiere dejar pudrirse este dossier judicial, como hizo con el cuerpo de Jon».
El recorrido judicial de este caso solo puede calificarse de sorprendente. Primero por la actitud de la procuradora de Baiona Anne Kayannakis, y después por la mostrada ahora por Myriam Viargues después de que el caso fuera remitido a Toulouse.
Maixo Pascassio, compañera de Jon Anza, explicaba en la comparecencia de abril que «todas nuestras preguntas se han quedado sin respuesta. Los mandatarios no nos han recibido, no nos hacen caso. Pero no lo aceptamos y no lo aceptaremos», recalcó.
Un mes después, la juez de Toulouse ha roto su silencio con esta citación a la familia de Jon Anza. En teoría, en la reunión la magistrada debería informarles de la evolución del sumario y de cuáles son sus intenciones de futuro a partir de lo que ya se ha investigado.
Dado lo ocurrido hasta ahora, los abogados de la familia temen que el sumario pueda ser cerrado en falso. Al parecer, el Juzgado sí ha emprendido algunas diligencias, aunque con mucho retraso, entre las que podría estar el interrogatorio de algunos policías.