Rúper partió hacia Elche comenzado ya el campeonato de Segunda con la intención de disfrutar de minutos y reivindicar- se para volver a Osasuna. Una vez finalizada la liga de plata, el de Aiegi hace balance de este año, agridulce por no haber dispuesto de todas las oportunidades que considera debería haber tenido, pero confiado en que la próxima temporada estará en la primera plantilla de la escuadra rojilla, pues todavía le restan dos años de contrato.

Los vientos no han sido propicios en la ciudad ilicitana durante la segunda vuelta y ello ha provocado el divorcio entre entorno y equipo. El domingo, los dirigidos por César Ferrando despedían la temporada con una victoria mínima sobre el descendido Nàstic, pero su juego volvía a desatar los pitos en la grada. El Elche estaba llamado, como mínimo, a participar en el play-off por el ascenso y el que desde hace ya muchas jornadas no peleara por ello, acabó por enrarecer un ambiente del que ahora se quiere despedir Rúper para abrir otra nueva página en su trayectoria deportiva.

El centrocampista navarro ha jugado 19 partidos con los alicantinos -algo más de 600 minutos en total-, anotando dos goles, unas cifras que demuestran que ha tenido una participación relativa en el equipo. El futbolista lo justifica por el hecho de que «vine cuando ya se habían jugado tres jornadas y, después de que la campaña anterior, el Elche estuviese a punto de ascender a Primera, el técnico ya tenía un bloque que conocía muy bien y que tenía más o menos hecho».

Como consecuencia de ello, las ocasiones escasearon «más de lo que me merecía por mi juego», apunta Rúper, quien considera que «los partidos que he disputado lo he hecho bien y la afición estaba contenta conmigo». Tampoco le ayudó una lesión que padeció. «Cuando mejor estaba, que coincidió con un gol que marqué en Murcia, ese mismo día me hice una fisura en el pie y ello me mantuvo apartado ocho jornadas».

Convencer a Mendilibar

Aunque no muy asidua, la buena imagen que ha dejado su fútbol entiende el de Aiegi que debe permitirle quedarse en Osasuna. «Por mi cabeza no pasa otra cosa. Ahora tengo que recargar las pilas después de este final tan negativo y volver con muchas energías a la pretemporada de Tajonar. Voy a trabajar a tope para convencer a Mendilibar que tengo un hueco en la primera plantilla», asegura convencido de sus posibilidades.

En el año en el que ha estado en el Elche, en el conjunto rojillo han ocurrido muchas cosas, entre otras que los de abajo vienen apretando fuerte. Roberto Torres y Raoul Loe, cada uno con sus respectivas características, tienen muchos boletos para engrosar la medular, lo que supondrá más competencia para Rúper. «Pero eso siempre es bueno y confío mucho en mis posibilidades», apunta.