El fallo del Tribunal Constitucional sobre Sortu acelera a Rajoy. Le ha sobrevenido una prisa nada habitual en el PP. Desde noviembre de 2010 están pendientes de renovación cuatro magistrados. Claro, está por decidir la sentencia sobre el recurso contra la ilegalización de Sortu por el Supremo. Esto de los jueces es muy curioso. Ahora hablamos de «sectores». ¿Qué concepto tendrá la gente de la Justicia, cuando todo lo basan en que los jueces sean «progresistas» o «conservadores»? ¿Es posible que las ideas políticas, sociales, religiosas, o de cualquier tipo influyan en la sentencia del juez? La falta de profesionalidad es imperdonable; unos son católicos antes que jueces, otros de izquierdas antes que jueces. No solo son impresentables, sino que, en mi opinión, rozan la prevaricación.

Está visto, al Sr. Rajoy solo le activa el mundo abertzale.