GARA > Idatzia > Ekonomia

Crónica | protesta en el Instituto Iturrama

Una lección fuera de las aulas por una educación digna

Profesores y alumnos del instituto Iturrama cogieron libros y mochilas para salir más allá de las rejas del centro. Fueron clases atípicas dentro una situación atípica, en la que está en juego la calidad de la educación en Nafarroa. Y, también, una forma de mantener activa una actitud de protesta, puesto que la situación perdura.

p030_f01_100x100.jpg

Aritz INTXUSTA

«He elegido un texto de García Lorca», explica Margarita Bermejo, profesora de literatura castellana en el Instituto Iturrama. La clase de ayer era especial, puesto que se impartía fuera del centro escolar, al aire libre. «Queríamos sacar nuestro quehacer diario a la calle. Que se vea lo que hacemos todos los días, porque esta es una forma más de manifestar nuestro descontento con las medidas del Gobierno y del consejero», continúa la profesora. A lo largo de la jornada, varias clases (unas seis cada vez) abandonaban las aulas para continuar con su aprendizaje con los viandantes como testigos. «No todas las clases se prestan a esto, pero la lección se puede amoldar. Por eso elijo a Lorca. Trabajamos al poeta desde al lado formal y estético en la lección de hoy, que trata sobre «Bodas de sangre». Sin embargo, esta obra habla del papel del individuo dentro de una sociedad y de cómo cambiar las cosas», continúa Bermejo.

De pancartas y asambleas

Mientras la profesora de literatura explicaba el trasfondo de la protesta, en el césped que rodea al frontón había unos cinco círculos de alumnos sentados o tumbados, siguiendo sus lecciones. Izaskun Jorajuria, profesora de Física y Química se llevó a alumnos de tercero de la ESO. En su caso, la forma de enlazar la clase al aire libre con la protesta fue un poco más descarada. Dando una vuelta más a una de las frases más coreadas durante las manifestaciones, «Con la protesta también se educa», usó la protesta para explicar reacciones químicas.

«Si mezclamos NAOH con fenoftaleína, nos da una especie de tinte de color rosa y, con nitrato de plomo y yoduro potásico, obtenemos un color amarillo», explica Jorajuria, mientras se abraza a una tela plástica blanca de las que se usan para elaborar las pancartas. «En rosa vamos a escribir «Kalitatezko Hezkuntzaren alde» y, en amarillo, «Murrizketarik ez»», confiesa mientras le siguen los alumnos.

Kloti Caro, que imparte francés, empleó el día para repasar a la sombra de un árbol los condicionales. «Estamos ahora con la hipótesis. Como ejemplos, hemos puesto arranques como «Si yo fuera ministro...» o «Si yo fuera consejero...». Los alumnos tenían que rellenarlos», dice Caro. Esta profesora asegura que, para completar la frase, los alumnos han demostrado una creatividad tremenda y han logrado una serie de ideas que merecieran ser leídas por el consejero José Iribas. Al terminar la jornada, Caro se marchó a la asamblea de profesores que se celebraba en la Plaza de la Cruz.

Los sindicatos convocantes de las últimas movilizaciones celebraron dos asambleas ayer, una para Infantil y Primaria y, la otra, de Secundaria. En ellas se abordó qué posibilidades les quedan para seguir defendiendo su posición. El resultado fue una tormenta de ideas, en las que se rescataron unas cuantas iniciativas que, por ahora, no se han hecho públicas.

Ha habido tres huelgas muy exitosas, pero aún falta lo principal: parar los recortes. Ese es, sin duda, el mejor final para las lecciones que ayer se impartieron en Iturrama. A una mala, los estudiantes aprenderán a no tirar la toalla cuando lo que está en juego es su futuro.

 

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo