Los partido políticos de egipto lograron desbloquear la formación de una Asamblea Constituyente, después de que la anterior composición fuese rechazada por un tribunal, que denunció que los islamistas copaban el órgano que deberá redactar la nueva Constitución.

Por petición del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que gobierna el país desde la caída de Hosni Mubarak, los representantes de varios grupos, entre ellos el Partido Justicia y Desarrollo de los Hermanos Musulmanes, el salafista Al Nour, el Partido Socialdemócrata Egipcio y el Partido Egipios Libres, se reunieron en El Cairo.

La junta militar había dado a las formaciones un plazo de 48 horas para alcanzar un acuerdo y había advertido de que si seguían sin lograr un consenso se limitaría a actualizar la Declaración Constitucional que se aprobó en marzo del año pasado, menos de un mes después de la dimisión de Mubarak.

Finalmente los distintos movimientos lograron un equilibrio del 50% entre fuerzas islamistas y laicas. Además del reparto de fuerzas, los partidos acordaron que cada artículo de la nueva Constitución tenga que ser aprobada con el 67% de los votos en una primera sesión y con el 57% en una votación posterior.

El líder del Partido Al Wafd, Sayed el Badaui, señaló que la comisión estará formada por 100 miembros de las fuerzas políticas, juristas, constituucionalistas, así como por representantes de instituciones religiosas, sindicatos, jóvenes, mujeres y cristianos.

El representante del Partido Libertad y Justicia, Osama Yasin, informó de que 39 de los miembros pertenecerán a las agrupaciones políticas y añadió que otros 21 serán personalidades que representan a mujeres, jóvenes y cristianos.

El resto lo ocuparán jueces, expertos constitucionalistas, instituciones religiosas y sindicatos.