Tras la aparición de un txoko que casi nadie conocía y de las facturas millonarias en restaurantes, el anterior gobierno municipal, en manos del PNV, vuelve a estar en el centro de la polémica, después de que el actual equipo de gobierno denunciara ayer irregularidades detectadas en varios contratos de empleados municipales.

La alcaldesa de Lemoa, Saioa Elejabarrieta (Bildu), compareció ayer acompañada de Aitor Erauskin, Niko Urkiza y la juntera Idoye Errazti. Elejabarrieta explicó que reclamaciones realizadas por los trabajadores en los últimos meses han llevado al gobierno municipal a «indagar en los contratos de la plantilla». Tras analizar varios contratos, detectaron «irregularidades», que «han podido ser subsanadas readmitiendo a algunos trabajadores como fijos indefinidos», según apuntó.

Las irregularidades contractuales se han dado en diferentes áreas municipales, como la brigada de obras, en la que se encontraron cinco contratos mal hechos, por lo que el gobierno municipal «ha tenido que readmitir a los cinco trabajadores como fijos indefinidos para no tener que despedirles».

Otro tanto ha ocurrido en el área de Servicios, en la que se ha tenido que redefinir el contrato de algunos trabajadores, ya que constaban como autónomos, «cuando tenían el mismo horario que otros trabajadores asalariados y justificaban sus faltas», algo «dificilmente explicable», en palabras de la primera edil lemoarra.

Otro de los casos llamativos es el de un empleado que llevaba seis años trabajando sin que su antigüedad fuera tenida en cuenta en el contrato, por lo que ha sido ahora indemnizado.

De todos estos casos, únicamente dos han llegado a los juzgados. Una resolución judicial establece que el Ayuntamiento tiene que pagar 80.000 euros a uno de los afectados, aunque la sentencia está recurrida por ambas partes. Elejabarrieta se quejó de que «si la situación económica de Lemoa era bastante grave de por si, regularizar la situación de todos estos trabajadores es otro golpe al bolsillo», por lo que afirmó que el actual gobierno «está pagando la mala gestión» de la anterior Alcaldía.

También en Arrigorriaga

El grupo municipal de Bildu en Arrigorriaga también alertó sobre la «extrema vulnerabilidad» de la economía del Consistorio, y consideró «bochornosa» la lectura realizada por el concejal de Hacienda. La coalición soberanista informó de que el resultado de las cuentas municipales de 2011 «no cumple con la ley de estabilidad presupuestaria», ya que arroja un importe negativo de 785.033 euros.

La coalición soberanista explicó que este dato obligaría, en teoría, al Consistorio a elaborar un plan económico-financiero antes de tres meses. A juicio de Bildu, este indicador significa «que el Ayuntamiento no genera los recursos suficientes para mantener el nivel de gasto actual», ya que los créditos pedidos «no pueden ser considerados como ingresos».