Ariane Kamio | Kazetaria
Por la escuadra y a lo grande
El Gobierno español no ha elegido mala fecha para hacer pública la petición de «ayuda» a Europa para recapitalizar a la banca. Lo hizo en plena Eurocopa, en la víspera del debut de la selección española en el campeonato. Quizás sea casualidad que el Ejecutivo de Mariano Rajoy desenfundase el arma justo el 9 de junio, pero lo sea o no, la cuestión es que el anuncio llegó a última hora de la tarde del sábado, cuando el currela de a pie disfruta seguramente del momento más placentero de la semana (como para acordarse del rescate, ya nos enteraremos mejor el lunes, cuando vayamos a trabajar). Teniendo en cuenta que el campeonato acaba de empezar, y que la selección de Vicente del Bosque es una de las candidatas a reeditar el título, ¿cuántas veces desenvainará Mariano Rajoy su espada de aquí a la final del 1 de julio? Para espada, claro está, la de Damocles.
El presidente español viajó a Polonia el domingo para presenciar el debut de su selección ante Italia y aprovechó la ocasión para «mostrar una imagen de normalidad», tal y como recalcaban algunos medios estatales, aquellos que desde el «sablazo» del sábado se encargaron de sustituir la palabra «rescate» por una mucho más suave y optimista: «ayuda».
Y es que con una terminología así parece que en Europa nos quieren, y mucho. Tanto que nos dan una «ayuda» de nada más y nada menos que dieciséis billones de las antiguas pesetas.
Claro que todo lo prestado algún día hay que devolverlo, y con sus respectivos intereses. Echando la vista atrás, esta situación se asemeja a la creada hace unos años por nuestros amigos los bancos, esos que, además de darnos la «ayuda» para comprar una casa, también nos la daban para comprar coche, muebles, vacaciones y hasta el asilo para la abuela si hacía falta. Todo ello solamente a cambio de agradecerles su hospitalidad durante al menos los próximos treinta años de nuestra vida (si no son cincuenta). Solamente. Ahora que son ellos los que necesitan dinero, digo yo y tiemblo al pensar ¿por dónde nos meterán estos el próximo gol? No andará lejos de la escuadra, seguro. Pero tranquilos, que mañana juega España. ¡A por ellos...!