La mayoría absoluta del PP en la Mesa del Congreso vetó la comparecencia del presidente español, Mariano Rajoy, para que explique el rescate de la banca acordado el sábado por el Eurogrupo. Todos los grupos de la oposición exigieron que ofrezca detalles sobre la situación económica del Estado español. Pero el PP está dispuesto a alargar la sesión hasta el 11 de julio casi un mes después de que Europa decidiese inyectar un máximo de 100.000 millones para tapar los agujeros de la banca. En principio, la fecha tope para solicitar sesiones monográficas era el sábado al mediodía, antes de que se conociese el rescate. Por ese motivo, el órgano rector del Congreso no tomó en consideración la batería de solicitudes de comparecencia presentada por todos los grupos. Sí que se debatió sobre los requerimientos dirigidos a analizar la situación de Bankia y de la coyuntura económica en general. Nuevamente, el rodillo del PP las echó atrás. Tampoco se ve con buenos ojos la creación de una comisión de investigación sobre Bankia.

El portavoz parlamentario del PP, Alfonso Alonso, explicó que Rajoy solo hablará tras la reunión del Consejo Europeo que tendrá lugar el 28 y 29 de junio. Quien sí que podría responder ante el Congreso es el ministro de Economía, Luis de Guindos.

Ante la avalancha de reclamaciones que exigen que el Gobierno español aporte explicaciones, el PP recurrió a la «lealtad» para descalificar a los grupos de la oposición. Estos, por su parte, denunciaron las contradicciones existentes entre los discursos públicos del presidente, el ministro de Economía o los líderes europeos.

Gracias al blindaje de la mayoría absoluta, Rajoy no dará explicaciones en una comparecencia formal. Pero sí que tendrá que responder hoy a las preguntas del PSOE. La formación anunció que modificará la redacción de las interrogaciones que ya tenía previstas. Las preguntas de control al Gobierno tienen una respuesta de apenas dos minutos y medio de duración, por lo que Rajoy podrá no extenderse sobre las consecuencias del rescate.

Sin embargo, será la primera ocasión en la que el Gobierno español se enfrente a la palabra «rescate», que viene ocultando, bajo el eufemismo «línea de crédito para la banca», desde la reunión del Eurogrupo.