Los iruindarras están acostumbrados a que, desde los medios de comunicación españoles, se evidencie un enorme desconocimiento de los sanfermines, de la ciudad y de la cultura vasca en general: conexiones en directo «desde la calle Estafeta» en las que puede verse al fondo la Estación de Autobuses, intrépidos reporteros que confunden a pastores y dobladores, presentadoras que creen que los encierros se corren en dos pases diarios (uno matinal y otro vespertino)... La retransmisión del encierro de TVE era la excepción a tan penosa norma. Hasta ahora. De un tiempo a esta parte, las quejas por los errores de bulto, las imprecisiones y el desconocimiento que muestran algunos comentaristas de la carrera se han convertido en tema central de tertulias y discusiones de barra de bar. De hecho, la cuestión ha trascendido ya los límites de la taberna, la peña o la sociedad.

La Unión de Criadores de Toros de Lidia, a través de su presidente, Carlos Núñez, ha enviado una carta al director de TVE, en la que le transmite su malestar «por la deficiente información taurina que se ofrece durante las transmisiones de los encierros». En la misiva, escrita el pasado lunes, la asociación de ganaderos centra sus críticas en las retransmisiones de este año, aunque valora «el esfuerzo de continuidad que ha realizado en la retransmisión de los encierros de San Fermín, en momentos de duro ajuste económico».

Según se recoge en el escrito, existe un «malestar» generalizado entre los diferentes hierros que intervienen en las fiestas: «Durante los tres encierros celebrados desde el pasado sábado hasta hoy lunes, a lo largo de los sesenta minutos de conexión, los comentaristas han evidenciado un preocupante desconocimiento de mínima cultura taurina, y, lo que es más preocupante aún, de la cultura del encierro».

Las ganaderías consideran que la retransmisión de los encierros a través de TVE «es un acontecimiento relevante en la sociedad», y echan de menos «los enriquecedores comentarios» de profesionales, que «siempre han supuesto una aportación a la cultura de todo aficionado». Por ello, animan a la televisión pública estatal «a que se mantenga una cobertura que enriquezca a quienes ya son aficionados y que seduzca a aquellos que lo descubren a través de sus imágenes».

Críticas en la red

La polémica no se limita al sector de las ganaderías. De hecho, los errores de bulto durante las retransmisiones de TVE son ya la comidilla de los aficionados en las redes sociales. Los espectadores no entienden, por ejemplo, que quien comenta los encierros no sepa cuántos toros faltan por llegar a la plaza o que entrevisten siempre a corredores que incumplen sistemáticamente las normas de la carrera.