Medio centenar de emigrantes africanos mueren cuando trataban de llegar a Italia
Cincuenta y cuatro emigrantes subsaharianos que trataban de llegar desde Libia a Italia fallecieron por hambre, sed y fatiga durante la fallida travesía que duró quince días, según el único superviviente, un joven eritreo que fue encontrado por pescadores junto a la costa tunecina.
GARA | TÚNEZ
Más de 1.300 migrantes africanos han logrado este año alcanzar las costas italianas y mil más han llegado a Malta, pero nunca se sabrá cuántos han sido tragados por las aguas del mar Mediterráneo. Según estimaciones del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que el martes por la noche informó de la muerte de 54 subsaharianos cuando intentaban llegar a Italia, desde enero han fallecido unas 170 personas.
El único superviviente de la última tragedia conocida, el eritreo Abbes Settou, de 25 años, relató a ACNUR y a AFP que cincuenta y cuatro subsaharianos (eritreos y somalíes), entre ellos diez mujeres, perecieron por «hambre, sed y fatiga» durante la larga y truncada travesía desde Libia hasta Italia, que duró unos quince días, y sus cuerpos fueron arrojados al mar.
Settou fue encontrado por varios pescadores tunecinos junto a la costa de este país agarrado a los restos del bote hinchable en el que trató de llegar a Europa y fue ingresado en el hospital de Zarzis para ser tratado por deshidratación y quemaduras.
Finales de junio
Según su testimonio, la embarcación partió de Trípoli a finales de junio y al día siguiente estaba próxima a las costas italianas, pero los fuertes vientos la llevaron de nuevo mar adentro, el bote fue deshinchándose y el teléfono por satélite no funcionaba. Explicó que no había agua ni comida a bordo, probablemente porque el trayecto es considerado corto, y los inmigrantes empezaron a morir deshidratados en cuestión de días después de beber agua de mar.
Alexander Aleinikoff, portavoz del ACNUR, hizo un llamamiento «a todos los capitanes de las embarcaciones que navegan por el Mediterráneo para que presten la máxima atención y refuercen las alertas ante posibles casos de inmigrantes y refugiados en apuros que necesiten ser rescatados». Agregó que «el Mediterráneo es unas de las vías marítimas más transitadas del mundo y es fundamental que la antigua tradición de rescate en el mar siga siendo respetada».
En la actualidad, en este mar hay una embarcación con medio centenar de migrantes subsaharianos que rechazan la ayuda de las fuerzas militares de Malta para evitar ser devueltos a su punto de partida.
El pico en los intentos de los migrantes de llegar desde África a Europa se sitúa entre mayo y setiembre, cuando la mar está más tranquila. Libia, y en menor medida Túnez, sirven de punto de partida o de tránsito a quienes arriesgan sus vidas en la búsqueda de un futuro mejor.
El ACNUR informó de que en el Mediterráneo hay en la actualidad una embarcación con medio centenar de eritreos y somalíes que rechazaron ser rescatados por las fuerzas militares de Malta para evitar ser repatriados a su punto de partida e intentar llegar a Italia.