La empresa Kider, con dos centros de producción en Amurrio y otro más en Barakaldo, ha sido una de las últimas en sumarse al carro de los ERE. La dirección ha puesto en marcha un ERE de suspensión de 30 días durante los meses de julio, agosto y septiembre para toda la plantilla. En todo el Estado español son 425 trabajadores. La empresa alega que el comité ha rechazado su propuestas alternativas.

Por su parte, desde el comité, mantienen que lo único que ha planteado la dirección es «la adopción de salidas no voluntarias y la destrucción de empleo a través de un mal llamado Plan Social». Dicho plan, según los representantes de los trabajadores, se basa «en la reducción de del 10% de la plantilla total del Grupo a través de bajas incentivadas, de prejubilaciones y un sistema de externalización de determinados servicios, acompañada de una propuesta de reducción salarial de entre un 10 y un 25% de la masa salarial».

Por otra parte, la dirección de la compañía guipuzcoana Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) ha presentado un expediente de suspensión temporal de empleo que afecta a 582 personas de la factoría de Zaragoza. El expediente recoge un máximo de 51 días laborables de suspensión distribuidos en un periodo de seis meses por razones productivas, informó el presidente del comité de empresa, Gari Sancho, en una nota de prensa.

La aplicación del expediente se prolongará desde el próximo 10 de septiembre hasta el 10 de marzo de 2013 y, según Sancho, la empresa justifica el ERE en el «parón en el mercado ferroviario nacional». Un argumento, a juicio del comité, «un poco difícil de entender cuando en todos los medios se publicaba una cartera de pedidos cercana a los 5.000 millones de euros y unos beneficios que aumentan cada trimestre», aunque la mayor parte de ellos proceden del exterior. Los representantes de los trabajadores tratarán de reunirse con diferentes cargos públicos de la comunidad autonómica para defender el empleo en CAF y el futuro de la planta zaragozana de la compañía.

Despidos en Muskiz

Por otra parte, en los últimos días han sido despedidos nueve trabajadores en el Centro Formativo de la localidad vizcaina de Muskiz, según en sindicato STEE-EILAS «coincidiendo con la aprobación definitiva de la Reforma Laboral».

La central señaló que la semana pasada nueve trabajadores de este centro recibieron la comunicación de su despido y tanto el comité como la asamblea de trabajadores mostraron su «rotundo rechazo» a esta medida y exigieron que dichos despidos no se ejecuten.

Entretanto, las plantillas de Matricerías Deusto, GTS y Araluce, empresas dedicadas al diseño, fabricación y puesta a punto de troqueles dentro del sector del automóvil, situadas en Zamudio e Igorre, decidieron en asamblea realizar paros de dos horas todos los martes y jueves de julio y agosto para protestar contra los recortes salariales y el aumento de la jornada laboral. Según informó LAB en un comunicado el motivo de la convocatoria es «responder a los recortes planteados por la empresa», ya que «los 390 trabajadores que integran las plantillas llevan sufriendo una congelación salarial los años 2009, 2010, 2011 y 2012».

«Aun así, la empresa, en su plataforma de convenio, incluye una bajada salarial del 20 por ciento, así como un incremento de jornada anual entre 36 horas y 56 horas dependiendo del tipo de jornada trabajado y una eliminación sistemática de sus derechos sociales», denunciaron.

Paros en AMCOR

Los trabajadores de la empresa AMCOR Flexibles en la planta de Lezo (Gipuzkoa) están llevando a cabo una serie de paros alternos en relación a la negociación del convenio, que se mantiene desde noviembre pasado, y ha convocado otros tres para los días 15, 16 y 17 de este mes.

La empresa pertenece al grupo AMCOR Flexibles Hispania y se dedica a la imprenta de envases. En la planta de Lezo cuenta con 120 trabajadores. ELA denunció que esta empresa, «con solvencia económica reconocida y beneficios», pretende «disponer de manera unilateral de las condiciones de trabajo».