El muy falangista ministro de Interior español ha dado el pistoletazo de salida para perpetrar el disparate de manipular el censo electoral de Euskal Herria. La pléyade de asociaciones de víctimas y foros antiabertzales asociados sacan la calculadora y estiman que la «diáspora democrática vasca» está compuesta por más de 200.000 vascos. Se les ve el plumero. Pero, una vez más, se pasarán de frenada y nuevamente les saldrá el tiro por la culata.