Arnaitz GORRITI

Teniendo en cuenta que ha llegado a los Juegos Olímpicos a última hora y casi de forma precipitada, cabe destacar la gran actuación de Jonathan Castroviejo en la prueba en línea. Con la tarea de endurecer la carrera para que la selección británica no pudiera llevar en volandas a Mark Cavendish, el getxoztarra se infiltró en la principal fuga y, no solo eso, sino que se mantuvo entre los elegidos hasta que se decidió la carrera.

«La carrera en línea era un test importante de cara a la contrarreloj y todo ha salido tan bien que me siento reforzado», reconocía tras la prueba el ciclista vizcaíno, que no escondía su «miedo a defraudar» tras tener que sumarse a la concentración olímpica ante la baja de última hora de Samuel Sánchez.

Ahora, los 44 kilómetros de la prueba contra el crono le darán opciones de lucirse, si es que las fuerzas le responden al mismo nivel que el pasado sábado. Si en aquel entonces su labor era preparar el terreno para Luis León Sánchez -también presente en la contrarreloj- y Alejandro Valverde, en esta ocasión el vizcaíno podrá explotar sus virtudes, aunque es conocedor de que hombres como Wiggins, Cancellara -aunque será duda hasta última hora tras su caída en la prueba en línea- o Tony Martin son los candidatos principales a repartirse las medallas en liza.

Así pues, sus objetivos son más humildes, dentro de la ambición. «Personalmente, voy a ver si me puedo meter entre los diez primeros, pero creo que llego en un buen momento para hacer buen papel», afirmaba.

«El evento más importante»

Una vez superada la responsabilidad para con sus compañeros en la selección hispana, a Jonathan Castroviejo ahora le toca disfrutar en los 44 kilómetros de la prueba contra el reloj. «Al final, es el evento deportivo más importante que existe», dice.

La principal pega que presentaba, por contra, era la de no poder supervisar a conciencia el recorrido. «Con este tráfico, de momento, es imposible acercarnos al lugar donde se va a celebrar la crono para ver el recorrido. Así que creo que no lo haremos hasta que se dispute, cuando espero que cierren la carretera al menos una hora para que podamos supervisarlo».

Y es que Castroviejo comentó que sí sale motivado a la crono. El de Getxo tiene aún grabada en la piel la ilusión de su debut olímpico, en el que llevó el dorsal nº 1 de Samuel Sánchez y se metió en la fuga buena. «Venía de casi un mes sin competir y siempre tienes dudas de saber cómo vas a llegar», reconoció el ciclista del conjunto Movistar.

Sobre la prueba contra el crono, el vizcaino la compara con las del Tour. «¿El túnel del viento? Nunca he tenido la posibilidad de ir. La crono de los Juegos es como la del Tour en cuanto desarrollos, no varía nada. Tampoco miramos las bicis de los rivales. Como en la Fórmula Uno, las vemos todo el año, no las conocemos de memoria», indicó.