El banco central iraní ha creado una célula especial para hacer frente a las sanciones económicas impuestas por la Unión Europea y Estados Unidos para forzarle a abandonar su programa nuclear.

«Hemos establecido un cuartel general en la banca central que se reúne a diario y cuyo objetivo es gestionar las sanciones», indicó el gobernador de la banca central, Mahmud Bahmani, que comparó las sanciones con una guerra. «Hemos lanzado una guerra económica porque, si no, podríamos encontrar dificultades», afirmó Bahmani. La Agencia Internacional de la Energía calcula que estas sanciones harán bajar el 40% de las exportaciones de petróleo iraníes. También han hecho aumentar la inflación con la pérdida de la mitad del valor de la moneda frente a divisas extranjeras, pero Irán asegura que puede hacer frente a las presiones.

El presidente de EEUU, Barack Obama, anunció ayer la imposición de nuevas sanciones contra los sectores energético, petroquímico y financiero de Irán. En esta ocasión, las sanciones incluyen a dos bancos extranjeros, el chino Kunlun y el iraquí Elaf Islamic Bank, a los que responsabiliza de facilitar transacciones por valor de varios millones de dólares de parte de bancos iraníes. El secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, afirmó que estas sanciones están teniendo impacto, a pesar de que este «no sea obvio» por el momento. Como ejemplo de resultados puso el hecho de que Irán negocie con el Grupo 5+1. Las declaraciones de Panetta se producen poco antes de su visita a Israel, país que quiere forzar un ataque contra Irán, aunque su primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijera ayer que aún no lo ha decidido.