La representación de ELA en Amma de Nafarroa, la red de centros de atención a personas mayores, discapacitadas o dependientes, denunció que el convenio firmado entre la empresa y el sindicato CCOO supone una pérdida de derechos y una rebaja de las condiciones laborales. Añadió además, que el convenio ha sido firmado en minoría, lo que en su opinión, le resta legitimidad.

El nuevo convenio introduce una serie de cambios que afectan a diferentes aspectos de las condiciones laborales. En primer lugar establece un total de 1.729 horas anuales frente a las 1.699 que establecía el convenio anterior. Esto supone una diferencia de 30 horas.

Por otro lado, el convenio vigente hasta ahora incluía dos fines de semana libre al mes. Con el nuevo acuerdo, queda reducido a un fin de semana por mes. Respecto a los festivos, según ELA, el nuevo convenio establece que no hay festivos, cuando el anterior incluía catorce festividades. Asimismo, no se cobrarán los 13 euros que hasta ahora correspondían por fin de semana trabajado.

En este sentido, establece que se otorgan cuatro días de libre disposición siempre y cuando se trabajen todos los festivos del año. El acuerdo anterior concedía tres días de libre disposición sin condicones.

En lo que a las bajas respecta, el convenio anterior establecía el pago del 100% del salario en todas las bajas. Sin embargo, ahora solo se pagará en las bajas consideradas laborales.

El acuerdo recoge también varias medidas de flexibilidad. Por ejemplo, el convenio anterior establecía que las trabajadoras solo operarán en su centro de trabajo. Ahora se permite la movilidad a otros centros de la red. El calendario también se modifica, puesto que permite hacer trabajar a las empleadas hasta nueve horas seguidas.

Otro aspecto a destacar es el referente a la conciliación de la vida laboral y familiar. Hasta ahora, las empleadas establecían el horario de la reducción de jornada por hijo. En adelante, la reducción por hijo será de jornada diaria.

Firmas individuales

Un aspecto que llama la atención es que el convenio se aplicará solo a aquellas trabajadoras que accedan a firmarlo, cuando el anterior se aplicaba a la totalidad de la plantilla. ELA señaló que la firma del documento supone la pérdida de derechos mientras que no firmar supone mantener las condiciones actuales. Añadió que hasta el momento los convenios se han negociado y votado de manera colectiva, respetando la opinión de la mayoría.

Consideró que el cambio de sistema supone entrar en «individualismos» y un intento de traspasar la responsabilidad a cada una de las trabajadoras. Así, rechazó rotundamente el contenido del acuerdo y afirmó que la sección de ELA no firmará un convenio que supone perder derechos.