GARA > Idatzia > Kultura

Udate

«Prometheus» y la ingeniería creadora de la especie humana

«Alien», realizada en 1.979, fue una película avanzada para su tiempo, que revolucionó el cine de ciencia-ficción. Más de treinta años después la vuelta de Ridley Scott a aquel universo ya no sorprende tanto, porque se pliega a las exigencias formales de la industria actual.

p053_f02_149x97.jpg

Mikel INSAUSTI | DONOSTIA

«Prometheus» es una cinta formalmente espectacular concebida para ser proyectada en 3D y, mejor aún, en sistema IMAX. Por lo que contentará a las nuevas generaciones que buscan un entretenimiento superficial que en la parte tecnológica esté a la última. En cambio, para el público que quedó impactado por el estreno de «Alien» hace 33 años supondrá una decepción, al no profundizar en los misterios que la película planteaba, más allá de lo puramente anecdótico.

Basta ver el prólogo para darse cuenta de las intenciones de la película, ligadas de principio a fin a las teorías de Erich Von Daniken sobre el origen extraterrestre de la especie humana. Todo empieza con una pareja de arqueólogos encontrando restos de presencia alienígena en las excavaciones de unas cuevas prehistóricas de Escocia. La protagonista, interpretada por la actriz sueca Noomi Rapace, se convierte acto seguido en una misionera del espacio, representativa de la nueva religión a la búsqueda del sumo creador venido de otro planeta.

Cualquier comparación entre la heroina de «Prometheus» y la teniente Ripley inmortalizada por Sigourney Weaver resulta risible, más aún cuando los diálogos de la película del 2012 carecen de impacto, dentro de un guión infantiloide repleto de situaciones incoherentes que ya no provocan la tensión o la inquietud de antaño.

Por otro lado, «Prometheus» carece de la consistencia narrativa que se le debería exigir a una superproducción, salvo porque denota recortes e inseguridades en su planteamiento. La Fox asignó a la película la mitad de la cantidad demandada por Ridley Scott, a la vez que le exigía hacerse cargo personalmente de la dirección, cuando él quería delegar en su yerno Carl Erik Rinsch. La falta de definición del producto proviene de la errónea estrategia promocional, basada en jugar al despiste con los seguidores, con si iba o no iba a ser otra entrega de la franquicia «Alien», para finalmente decir que está desligada del resto.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo