El Athletic 2.1 de Marcelo Bielsa se va pareciendo ya al Athletic 2.0 de Marcelo Bielsa. La nueva versión de los rojiblancos que comanda el técnico argentino afronta su segundo test oficial de la temporada con posibilidad de que si el preparador así lo decide hoy -la expedición parte hacia Croacia-, tanto el recuperado Aritz Aduriz como los `olímpicos' Iker Muniain y Ander Herrera sean de la partida el próximo jueves ante el Slaven Belupo. La afición, y es de suponer que el propio rosarino, tiene ganas de ver ya al once aproximado que pueda identificar para el resto de la campaña. Además, con Llorente más rodado, el Loco recupera en cuestión de días no solo dos piezas claves en la medular, sino a toda su artillería de vanguardia.

Justo en el momento en el que el Athletic empieza a jugarse cosas en Europa -y en breve en la Liga doméstica-, a día de hoy solo Amorebieta y Aurtenetxe -que ayer corretearon por Lezama- son bajas por motivos físicos, aunque ayer tampoco entrenó Igor Martínez. Con el retorno de Javi Martínez a las sesiones esta semana, Bielsa contará ya para encarar la previsible siguiente ronda europea y el estreno ante el Betis con un equipo de total garantía.

Ayer, en Lezama, la novedad fue la bienvenida presencia de Muniain y Herrera, que se entrenaron sin problemas, aunque la mayoría de miradas estuviesen puestas en el bilbaino, que admitió hace días seguir aquejado de sus problemas de pubalgia. De momento sigue ahí, y habrá que ver su evolución con el rodar de la temporada. La noticia, hoy, será si ambos jugadores viajan a Croacia.

Con la entrada de estos dos, además de la de Aduriz, habrá que ver también quiénes se caen de la convocatoria final que dé Bielsa este mediodía. Uno podría ser Igor Martínez, lo mismo que el joven Markel Etxeberria, que ya entró en la anterior pero se quedó sin vestirse, y habrá que ver si viaja y vuelve a dar minutos al debutante Iñigo Ruiz de Galarreta. Al menos, donde aparcará los problemas será en el eje de la zaga, ya con San José y Ekiza a su plena disposición para ser utilizados desde el inicio si así lo dispone el técnico argentino. Incluso veremos si sigue confiando en Isma López e Ibai Gómez.

«Llorente es muy duro»

Por lo demás, mientras la plantilla recupera efectivos y avanza en su puesta a punto, las inacabables negociaciones para renovar a jugadores emblemáticos del club sigue ocupando a muchos día sí y día también. Fernando Llorente volvió a recibir ánimos de algunos aficionados presentes ayer en Lezama, lo mismo que el domingo.

Y al de Rincón de Soto se refirió su compañero Óscar de Marcos en sala de prensa, para defender al ariete internacional y recalcar que «Llorente es muy duro, ha pasado cosas peores, es muy fuerte de cabeza y está mentalizado en que tiene que pelear para coger la forma adecuada. A los que le estén pitando, no nos gusta que lo hagan, pero creemos que lo superará».

Pitos en San Mamés el pasado jueves, que fueron los menos, y que se apagarían desde ya si el capítulo de las renovaciones se cerrara cuanto antes. Ayer ``Deia'' publicó que el Club ha dado un ultimatum o fecha tope, tanto a Llorente como a Amorebieta, para que acepten o no sus generosas ofertas.

Precisamente, el defensor de Cantaura ha hablado para la web de la Confederación Sudamericana de Fútbol. `Amore' asegura que Jupp Heynckes le dijo en su día «que era un jugador del que se iba a escuchar hablar» y, a la pregunta sobre qué pide el «hincha vasco», el central responde: «Sobre todo ganas, ganas de ganar, garra. Es lo que te vienen diciendo desde muy pequeñito».

De Marcos: «Somos favoritos»

El que habló tras el entrenamiento de ayer fue el alavés De Marcos. Lo hizo para felicitarse por la vuelta a Lezama de sus compañeros Iker y Ander, y para confesar su objetivo de igualar o mejorar su aportación al equipo de la pasada temporada, en la que fue uno de sus jugadores revelación con Bielsa.

«Fue un año muy bueno para mí», reconoció el de Guardia, que también se refirió al partido de vuelta en tierras croatas. «Allí vamos como favoritos», no tuvo reparo en admitir tras el 3-1 de la ida, para precisar que sobre el pequeño estadio del Slaven, el más pequeño de toda la Liga de su país, con capacidad para unas 3.000 personas, «veremos cómo está el césped, que es lo más importante».