Infraestructuras, dopaje, merchandising, seguridad y hasta las redes sociales como twitter han sido serios quebraderos de cabeza para el exatleta Sebastian Coe, que está siendo la cara visible y máximo responsable del evento, como presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Solventadas relativamente bien todas estas preocupaciones organizativas, el keniata Asbel Kiprop le supone una gran inquietud deportiva, ya que está en condiciones de igualarle como el único atleta capaz de repetir el oro en los 1500, dónde y en «sus» Juegos.

La amenaza, además, es real, ya que el mediofondista africano se presenta en Londres tras haber conseguido la mejor marca mundial del año el pasado 20 de julio en la reunión de Mónaco. Por si fuera poco, Kenia presenta una delegación potentísima, con tres representantes en la final, lo que ha dado gran confianza al vigente campeón olímpico y mundial de la distancia. «Es complicado decir quién de nosotros tres ganará la medalla de oro. Pero de lo que estoy seguro es de que se batirá el récord olímpico de 3:29.77 establecido por Noah Ngeny hace 12 años», aseguró recientemente el atleta keniata. Curiosamente, ese récord se lo arrebató, en Sydney 2000, un keniata a, precisamente, Sebastian Coe.

Político conservador

Convertido en político -miembro del partido conservador- desde los primeros años de los 90 y miembro del COI, Sebastian Coe es uno de los atletas ingleses más famosos y destacados, con cuatro medallas olímpicas y habiendo batido ocho récords mundiales en su época en su especialidad.

En plena guerra fría, la invasión de Afganistán por parte de la Unión Soviética provocó el enojo de Estados Unidos que, junto a otros 60 paises, orquestó un boicot hacia los Juegos de Moscú'80. Sin embargo, paises como Gran Bretaña, Francia, Italia y Suecia hicieron caso omiso al llamamiento. Allí, Sebastian Coe no solo desafió a Jimmy Carter, sino que también hizo lo propio con las marcas anteriores de su disciplina.

La vuelta a la «normalidad» en Los Ángeles'84, no afectó a Sebastian Coe, que revalidó su oro olímpico en la ciudad californiana, algo que no han podido hacer ni siquiera atletas del nivel de Hicham El Guerrouj o Noureddine Morceli.

El también argelino Taoufik Makhloufi, uno de los aspirantes a evitar el triplete keniata, estará definitivamente en la final, después de que los jueces se echaran atrás en su decisión de excluirlo por no esforzarse en las series de los 800, cuyas semifinales se disputarán 80 minutos antes de la final. Makhloufi salió en la primera ronda de las dos vueltas a la pista, pero rápidamente disminuyó su ritmo y abandonó a los 150 metros. En un principio, la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) decidió expulsarle de los Juegos entendiendo que había actuado de mala fe, pero por la tarde, el recurso de la Federación argelina fue tomado en cuenta y podrá tomar parte.

El salto de altura y el lanzamiento de disco en categoría masculina y los 100 metros vallas en chicas serán el resto de finales que se disputarán en la quinta jornada de atletismo del Estadio Olímpico de Londres.