BALONMANO Torneo masculino
Islandia y Croacia, invictas
Los dos partidos que decidían las dos últimas plazas que quedaban por adjudicar para los cuartos de final se resolvieron a favor de Túnez -única selección no europea clasificada-, en el Grupo A, y Hungría en el B.
Juan Carlos ELORZA
No hubo sorpresas en la última jornada de la previa. Los favoritos ganaron sus compromisos, y los partidos que resolvían las últimas plazas de los cuartos fueron competidos y duros en ocasiones. Gran Bretaña se despidió con otra goleada, y los ocho mejores ya piensan en futuro.
ARGENTINA-TÚNEZ (23-25). Estaba en juego una plaza para los cuartos de final, y las dos selecciones se emplearon a fondo para conseguirla. Túnez dio primero con un 0-4 inicial que obligó a Argentina a remar contra corriente toda la primera parte, hasta lograr empatar a 8, y llegar igualados también al descanso. En la segunda parte los africanos volvieron a abrir una pequeña brecha, hasta el minuto 46, en que se produjeron dos hechos que alteraron el partido. Con 17-19 Carou sufría su tercera exclusión y era descalificado -el seleccionador argentino se quejaría después de los árbitros-, e inmediatamente después el tunecino Touati veía la roja directa por una acción sobre Diego Simonet. Del desconcierto se aprovechó primero Túnez (17-21), pero Argentina se empeñó en remontar y llegó hasta el 21-22. Túnez, que será la única selección no europea en cuartos, no le dejó hacer más.
ISLANDIA-GRAN BRETAÑA (41-24). Había que jugar el partido e Islandia se dio un atracón pensando más en el cruce de cuartos. Aún así, los islandeses dieron «vidilla» a los anfitriones en la primera parte (18-15), para arrollarles después.
FRANCIA-SUECIA (29-26). Kim Andersson marcó el 0-1 para Suecia a los 38 segundos, y vivió el resto del partido por detrás en el marcador. Primero encajó un 5-0 (5-1, con dos goles de Karabatic y dos de Narcisse), y a partir de ahí Francia cogió la velocidad de crucero hasta llegar al descanso con seis goles de diferencia, y Omeyer tapiando su portería (37% de paradas en el primer tiempo, 7 de 19). En la segunda parte Suecia trató de remontar, pero Francia nunca permitió que la ventaja bajara de tres goles y ganó con soltura.
HUNGRÍA-SERBIA (26-23). Con la última plaza que quedaba para cuartos en juego, en la segunda parte Hungría fue superior, como reconoció el seleccionador serbio Vukovic al final. Tras llegar por detrás al descanso (9-11), las 12 paradas de Fazekas en la segunda mitad, y los 7 goles del lateral Tamas Mocsai (hijo del seleccionador, Lajos), resultaron determinantes. Además, un remate de Csaszar impactó con fuerza en el rostro de Stanic en el minuto 40, dejando mermado al portero serbio durante algunos minutos
DINAMARCA-COREA (26-24). A partir del empate a 7 del minuto 14, a Dinamarca se le complicaron las cosas ante un rival muy obstinado, que cogió una ventaja de dos o tres goles obligando a los daneses a jugar con el marcador en contra. No consiguieron empatar hasta el minuto 50 (21-21), y poco después la ventaja fue a su favor, aunque Corea no cedía. Mikkel Hansen, con 0 de 5 en tiros hasta entonces, tuvo que apretar para asegurar el triunfo y marcó sus dos únicos goles en esos instantes finales, el 24-22 y el 26-24 final.
ESPAÑA-CROACIA (20-25). Los primeros 20 minutos fueron de dominio español, mientras Croacia se adaptaba a las características del rival y del partido. La reacción comenzó en ese tramo final antes del descanso, primero con un parcial de 0-4 que ponía por delante a Croacia (del 9-6 al 9-10). En la reanudación el partido entró en una fase igualada hasta el empate a 13, en que un nuevo parcial de 0-3 despegaba otra vez a los croatas. España remontaba empatando a 19, y luego a 21, pero los croatas marcaron otro 0-3 en un minuto, y la capacidad de reacción hispana se agotó.