en puertas del debut liguero
La cautela suaviza las buenas sensaciones
Philippe Montanier se confiesa «un poco sorprendido» por la gran ilusión que está generando el equipo.
GARA | DONOSTIA
Ilusionado, pero cauteloso. Con ganas de empezar bien, aunque consciente de que todos los partidos valen tres puntos, independientemente de la jornada en que se disputen. Con esos «peros» y esos «aunques» aderezó Philippe Montanier su primera rueda de prensa de la temporada que arranca este fin de semana. Una comparecencia en la que también reconoció sentirse «un poco sorprendido» por la gran ilusión que parece haber despertado su equipo.
De cualquier forma, el propio entrenador normando es el primero en considerar que la Real 12/13 tiene una plantilla «aproximadamente igual, pero incluso un poco mejor que el año pasado». También que, tras una pretemporada que se ha saldado de forma satisfactoria, el equipo está «listo» para competir e «impaciente» por empezar a hacerlo cuanto antes.
Destaca, además, la «buena integración y adaptación» de los nuevos jugadores txuriurdines. Incluyendo a José Ángel, que «ha venido muy tarde pero que, después de dos o tres días, se le ve su buena integración con el grupo, en el vestuario, pero también en el campo. Es muy útil para nosotros tener una plantilla larga y lista».
En este sentido, para completar el apartado de razones para el optimismo, Montanier se muestra especialmente satisfecho por la polivalencia de muchos de sus hombres. «La pretemporada también sirve para eso. A nosotros nos ha servido para preparar a toda la plantilla, de manera que si hay dos o tres jugadores lesionados, el equipo pueda dar un buen nivel sin ellos». También subrayó la gran «implicación» que han mostrado sus futbolistas desde el primer día de trabajo veraniego.
Lo más arriba posible
¿Cuál es el pero de tanta buena sensación, que también lo hay? El peligro de la euforia. Montanier ha percibido «una gran ilusión» en torno a su equipo, lo que le tiene «un poco sorprendido, porque todavía no hemos ganado ningún partido. Después de seis, siete u ocho victorias es normal tener euforia, pero todavía ni siquiera hemos empezado», subraya el entrenador blanquiazul, que recuerda que «tampoco sabemos todavía cómo están los rivales» y que las temporadas «son largas y duras para todos los equipos». «Lo que hagamos en el campo nos colocará en nuestro sitio», añadió Montanier que, en la misma línea cautelosa, no quiso hablar de objetivos concretos.
«Es verdad que el año pasado luchamos, no hasta el final, pero hasta tres semanas del final. Pero también vimos que un equipo como el Villarreal empezó jugando la Champions y lo pagó al final. Es una Liga muy dura -insistió el normando-, pero vamos a hacer todo lo posible para dar una buena imagen y para acabar lo más arriba posible. Pero con humildad, porque sabemos que es dura».
Desde el primer minuto en el caso de la Real, que se estrena poniendo a prueba el nuevo proyecto del Barcelona. Montanier recuerda que «hay muy pocos equipos que han conseguido buenos resultados en el Camp Nou, pero siempre hay la posibilidad de hacerlo», y es consciente de que arrancar puntuando en la capital catalana daría mucha «moral» a su equipo. Por el escenario y porque la experiencia demuestra la importancia de «sumar muchos puntos a principio de temporada».
El problema es cómo conseguirlo, porque la Real se va a encontrar con un rival que también tiene «la voluntad de empezar bien, sobre todo con un nuevo entrenador y jugando en casa», y que además es un equipo repleto de «jugadores internacionales buenísimos, que probablemente va a dominar el partido y va a tener la posesión, con una gran calidad de juego a nivel individual y colectivo». Ante eso no queda sino «jugar a tope» y, sobre todo, mostrarse muy «eficaz», tanto «ofensiva como defensivamente. Es indispensable para conseguir un buen resultado. Es verdad que ante el Barcelona lo intentan todos los equipos y pocos lo consiguen, pero la eficacia será indispensable».
La Real comienza la Liga con 25.681 socios, después de que casi 600 aficionados se hayan dado de alta como abonados desde que comenzó la campaña, a primeros de julio.
Aunque tiene «una idea bastante clara», Philippe Montanier acabará de definir sus planes frente al Barcelona en el entrenamiento que dirigirá hoy (12.00) en Zubieta a puerta cerrada.
Su principal duda parece residir en el nombre del jugador que actuará como pivote y por el que, en principio, pelean Gorka Elustondo y Markel Bergara. Con ventaja para el elgoibartarra, después de que el primero no haya podido entrenar con el grupo hasta el pasado miércoles.
El que está descartado para viajar, confirmó el técnico, es Iñigo Martínez y, casi con seguridad, también David Zurutuza. GARA