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Udate

Tres himnos del rock

«Stairway to heaven», «Hotel California» y «Smells like teen spirit» no son canciones ni de los Beatles  ni de los Stones; sin embargo, esos tres títulos, además de poseer el respaldo de la historia y un bagaje mediático aún próximo y caliente, se muestran implacables respecto a otras posibles propuestas.

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Texto: Pablo Cabeza  
Fotografías: ARCHIVO

Stairway to heaven» se lanza el 8 de noviembre de 1971. Se incluye dentro del álbum «IV» de Led Zeppelin. Forma parte de la historia de la música a lo largo de cuatro décadas, donde no ha dejado de sonar. «Hotel California» se publica el 17 de febrero de 1977, dentro del disco del mismo título. Durante los setenta y los ochenta fue una de las canciones más radiadas en todo el mundo, aunque el récord lo ostenta esa «Escalera al cielo». «Smells like teen spirit» pertenece al disco «Nevermind». Aparece en el mercado el 24 de setiembre de 1991. Fue el himno de la generación X y la máxima expresión del grunge más emocional y tortuoso. La canción la produjo Butch Vig, a quien se le pudo ver tocando con Garbage en el pasado BBK Live.

La década del dos mil está próxima en el tiempo. Aaún no ha creado su clásico, aunque es posible que nunca lo tenga, como podría ocurrir con la actual, tal y como va la música. Presente donde la diversidad de géneros y subestilos han terminado con la repercusión social de un único título. Es posible que hayan concluido los himnos generacionales, que la noticia (Pussy Riot, por ejemplo) y el evento sustituyan a la grandiosidad de los dinosaurios del pop o del rock, tan criticados por el punk. Asimismo, la proliferación de tribus y la banalidad han acabado con las banderas musicales. Con todo, no se puede negar que Ramones, Pistols, Clash, Metallica, Pink Floyd... o incluso David Gueta y otros mil más cuenten con canciones líderes. Existen y están ahí, pero no son ni poseen las circunstancias de las tres que reunimos hoy en estas páginas.

«Stairway to heaven»

Cientos y cientos de versiones, de alumnos de guitarra y demás han sentido la curiosidad de replicar el «Stairway to heaven» de Led Zeppelin, una canción de hard-rock con su punto folk y blues. Como se desea que esta página sea un divertimento, sugerimos al lector que busque en Youtube, donde el texto se puede contrastar. De las decenas y decenas de versiones recopiladas, al final no diferimos mucho de la tendencia general al respecto; es decir, que las versiones más sugerentes son las realizadas por Frank Zappa, Rodrigo y Gabriela y Dolly Parton. Cada una con un enfoque diferente. La originalidad de Zappa se centra en el hecho de utilizar metales y darle un toque reggae a la canción. Los vientos suenan impactantes. En el caso de Rodrigo y Gabriela, es el arte guitarrero y la actitud que toma la versión bajo las dos guitarras acústicas: un vendaval. Dolly Parton es una de las figuras del country entre bueno y barato, pero el toque bluegrass que le da, sumando la entonación de Parton, abruman. Son correctas versiones como las de Heart o Apocalyptica, con sus juegos de cuerda; Gregorian, con su canto gregoriano mezclado con una banda de rock; Leningrad Cowboys & Russian Red Army Choir (notable), banda de campanas, corales, proyectos operísticos... Pero ninguna supera la imaginación de las tres propuestas estelares. De igual forma, nadie aventaja al original, tal y como sí ha ocurrido con otras canciones, aunque en contadas ocasiones: por ejemplo, Jimi Hendrix con «All along the watchtower», sobre Dylan, o Jonny Cash con «Hurt», sobre Nine Inch Nails. «Stairway to heaven» contiene uno de los mejores solos de guitarra de la historia del rock. En directo, Page la tocaba con una Gibson de doble mástil. Primero la sucesión de acordes y la mano derecha que lanza el prodigioso solo de guitarra hacia la zurda.

«Hotel California»

No es la segunda posible mejor canción de la historia del rock, sólo tiene sus circunstancias: una proyección y escucha en Euskal Herria muy alta, además de la versión de Akelarre, que la introdujo en decenas y decenas de noches de fiesta. La canción está compuesta por Don Felder, Don Henley y Glenn Frey. El solo de guitarra se lo reparten Don Felder y Joe Walsh, un buen guitarrista que acababa de llegar a la banda. Es más sencilla que «Stairway to heaven», por lo que las versiones no cuentan con demasiada singularidad. Sorprende que la banda alemana Tangerine Dream la eligiera para su álbum de versiones de 2010. Su interpretación decepciona en una primera escucha, pero alienta el espíritu con alguna oportunidad más. Aburren Alabama 3. Se medio derrumba el hotel con la calma sosa de Nancy Sinatra. Max Romeo la pasa al reggae, pero no cuenta nada. Es tal el panorama, que cuando se escucha la versión de Gypsy Kings llega el imparable subidón. El grupo Pentágono también la versiona en castellano; quizá insulsos. Es correcta tirando a buena la revisión de The Killers en el álbum recopilatorio «Rhythms del Mundo». American Wedding/Frank Ocean la actualiza próximo al chillout; sin más.

Si se teclea en Youtube «Hotel Can't Afford Ya» o «Motel Californie» se dará con dos versiones mofa del tema. La canción tuvo tanto éxito y una letra tan absurda (que nunca supieron explicar), que algunos humoristas y grupos se inclinaron por la sangre.

Youtube permite ver cómo numerosos solistas recrean el solo de guitarra (memorable) de la canción, demostrando que el estilo, la forma de pulsar, de sostener... es más importante que una escala a diez mil por hora.

«Smells like teen spirit»

¿Existen dos propuestas vascas que se atreven con el gran éxito del grunge, de la generación perdida, del alma dolida? Sí. La primera muy digna, aunque basada en anteriores versiones realizadas por grupos de jazz con ganas de divertirse o de llegar a más público. Es el caso de Nevermind People, que la actualizan con espacios, temperatura y mucha clase. Gaztelupeko Hotsak editó el primer disco de la banda de Ainara Ortega, Jorge Abadías, Aritz Luzuriaga y Hasier Oleaga. El otro caso pertenece a Ainhoa Arteta, que lleva dos discos de versiones de canciones pop y rock impresentables, nefastos. Su multinacional, y ella, deben pensar que con unos arreglos, unos músicos de estudio y su voz engolada es suficiente. Arteta demuestra, una vez más, que los cantantes de ópera no pueden ni saben cantar pop o rock, y menos tener actitud. De esto saben mucho unos pioneros en busca de la pasta y el espanto pop, Los Tres «Temores».

«Smells like teen spirit» (de letra, como las anteriores, sin demasiada conjunción, una pájara mental) es una canción sencilla, por lo que si se le resta la actitud de Nirvana, corre el riesgo de quedarse en una versión ramplona, copia de copia en máquina. En castellano, Bebe y Pitingo no se lucen, lo del segundo es sacar el pañuelo y no parar de llorar. Tory Amos, al piano, se acerca a la versión sublime. Aconsejable su escucha. Paul Anka la aproxima al swing, está bien, pero él la canta fatal. The Ukulele Orchestra of Great Britain, divertidos. Melvins, aceptable. Scala & Kolacny Brothers, para una vez. The Flying Picket, a capela, sobresaliente. Patti Smith aburre con su «no pasar nada». Es la venganza de Kurt Cobain.

El Hotel California de Soraluze

Akelarre fue una banda creada en 1972, aunque un grupo de chavales de 16-17 años ya sacaba punta a sus instrumentos a finales de los sesenta. Tras una amplia discografía -cuyos primeros álbumes cuentan con cierto aprecio monetario en Internet, al relacionarlos con el rock progresivo-, la banda de Soraluze se despide con un disco titulado «Akelarre 1972-2005 zuzenean».

Akelarre, además, es una de las formaciones más populares que ha dado la historia del rock vasco, tanto por sus discos como, en especial, por los cientos de conciertos ofrecidos tanto en discotecas como en plazas.

Eran los años en los que el público se movía a una verbena por el grupo que tocaba. Hoy en día sigue contando la romería, la fiesta... Se valoran las versiones, el divertimento y, si cabe, la puesta en escena, pero no tanto quién toca.

En 1982 Ina Goikoetxea (exguitarra de Urko), Pako Díaz(exbatería de la Orquesta Mondragón y Odeia), Juan Markos Juaristi (bajo), Aitor Amezaga (hijo del escritor Elias Amezaga y exteclista de Estitxu) y Anje Duhalde (ex-Errobi, voz), viajan hasta Barcelona para grabar «Gau pasa...», disco que contiene «Hotel California».

El responsable del sello IZ, Fernando Unsain, les concede dos semanas de grabación, pero al final resultan tres por los problemas de garganta de Duhalde, al que tienen que inyectarle cortisona para poder recuperar la voz. A los mandos de la mesa ya se encuentra un joven Angel Katarain. Todos están de acuerdo en repasar «Hotel California. Les gustaba ese sonido electroacústico y el toque vaquero. La versión es un éxito y en sus calurosas romerías no falta durante muchos años. El disco está descatalogado, pero se puede comprar digitalmente en www.ibaimusic.com. P.C.

Subsconscientes, canciones inductoras, plagios y acordes casuales

Hace unos días, GARA comentaba que el famoso «Child in time» de Deep Purple se parecía en su entrada sospechosamente a «Bombay colling», de la banda It's a Beautiful Day, quienes, a su vez, habían tomado la principal idea de la canción de un músico de jazz anterior al grupo que había tocado previamente con el líder de IBD la canción base. Pasado el tiempo, se produce la ruptura, pero queda en la mente una vieja canción que te ha gustado y revive.

En el caso de «Starway to heaven», no existe una sentencia de plagio, pero ciertas semejanzas con «Taurus» sugieren que esta canción pudo ser el punto de inspiración de Jimmy Page para componer su «Escalera al cielo». «Taurus» es un breve instrumental que aparece en el primer álbum de la banda californiana Spirit, capitaneada por el envolvente y original guitarrista Randy California. Además, Led Zeppelin fue telonero en Estados Unidos de Spirit. Estos tocaban en directo «Taurus» y los Zeppelin aún no habían compuesto «Starway to heaven». Randy siempre sostuvo que Page se había fijado en su instrumental, pero nunca hubo pleito. Es posible la «inspiración», lo entenderá quien quiera que escuche ambas canciones, pero Plant y Page fueron mucho más allá. No obstante, los Zeppelin eran muy dados a «recordar» otras canciones.

Ian Anderson, de Jethro Tull, tampoco fue al juzgado para denunciar un plagio, pero siempre sostuvo que su canción «We used to know», de 1970, se parecía demasiado (incluso en el solo de guitarra) al «Hotel California». También se da el hecho de que Eagles fueron teloneros de los Tull años atrás. Compararlas en Youtube es cuestión de introducir nombres. P.C..

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