El proyecto de Tabakalera sigue su curso. Así lo confirmó el alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, en calidad de presidente del Consejo de Administración del Centro Internacional de Cultura Contemporánea al presentar oficialmente a Ane Rodríguez como directora cultural y a Haritz Azkarraga como gerente del centro.

Rodríguez tomó la palabra diciendo que el proyecto que presentó ante el Consejo, por el cual ha sido elegida directora, tiene como punto de partida el que se aceptó inicialmente. «Tabakalera será una fábrica de creación, exhibición y conocimiento, pero sobre todo ofrecerá apoyo a la primera parte», explicó.

Además, informó que se buscará la participación de todos los ciudadanos y que se intentará facilitar el contacto entre el mayor número de dinamizadores posibles, y conseguir así que Tabakalera sea «una ciudad cultural, un centro neurálgico de la ciudad, un elemento cohesionador y el reflejo de distintas iniciativas» con un contexto local pero con ambiciones internacionales.

Al respecto comentó que no hay que ver el proyecto como algo exclusivo de los donostiarras, sino que debe extender lazos territoriales. Según ella, no tiene sentido copiarse las ideas ni poner en marcha ideas sin haberse puesto en contacto con otras instituciones porque podrían solaparse. Rodríguez pretende fijarse en los demás, aprender y fomentar el intercambio. Puso como ejemplo la exitosa iniciativa que ha tenido lugar este verano con la colaboración de Zawp Bilbao y Tabakalera, «Summer of labs», consistente en talleres artísticos participativos.

Del mismo modo cree que los problemas que desde 2009 se han venido sucediendo en torno a Tabakalera desaparecerán y se crearán lazos entre las instituciones que compartirán espacio en el edificio (Instituto Etxepare, Zinemaldia, Filmoteca Vasca...) y entre las que de momento se han quedado fuera como Arteleku, porque todas ellas forman parte de nuestra cultura. Así Rodríguez pretende que Tabakalera se convierta en un espacio para dar continuidad a los festivales variados que se celebran en Donostia en momentos puntuales.

Nuevo uso del espacio

La apertura del Centro Internacional de Cultura Contemporánea supondrá un gran impulso en la cultura local, pero para ello es necesario replantear los espacios. Tabakalera será, tal y como se decidió al principio, un centro multidisciplinar y no exclusivamente audiovisual. Su uso todavía no está completamente definido porque este podría modificarse en base a las nuevas tecnologías que cada vez avanzan más rápido. Según explico Rodríguez, el proyecto cuenta con dos fases importantes; por un lado, la apertura del centro, y por otro la programación deslocalizada, que se ha estado desarrollando continuamente y no se ha dejado de lado en ningún momento.

De este modo, la nueva directora cree que es necesario invertir en la investigación y no solo en la realización de un trabajo. «Muchas veces lo que se fomenta es la creación de una pieza, pero también es importante invertir en la reflexión de ideas».

El nuevo gerente Azkarraga, por su parte, hizo hincapié en que la reforma arquitectónica de la antigua fabrica de tabaco concluirá en 2015. Según dijo, a pesar de que la situación económica es desfavorable, se están respetando los plazos establecidos. «Nos tocará adaptarnos a situaciones inesperadas, pero con trabajo en equipo, rigor y apoyo de las instituciones conseguiremos llegar a buen fin», aseguró.

En cuanto al presupuesto con el que cuenta el proyecto, declaró que se ha visto reducido a 56 millones de euros (en marzo de 2011 contaba con 70 millones), pero que a pesar de ello la cantidad de espacio sigue siendo parecida. «Contamos con 37.000 metros cuadrados, 700 menos que antes. Se ha redimensionado el espacio debido al cambio de usos de las salas», explicó.