El ayuntamiento de Donostia y la Diputación de Gipuzkoa difícilmente aportarán dinero
¿Es viable remodelar Anoeta?
La clave de la retirada de las pistas y de la ampliación del aforo es la reducción del presupuesto y el porcentaje que asuma el club.
Joseba ITURRIA
El equipo de Gobierno del ayuntamiento de Donostia dio la pasada semana el paso más importante en el camino que quiere abrir el afán de la Real Sociedad de disponer de un campo de fútbol sin pistas de atletismo. Planteó un escenario que cuenta con el respaldo de tres de los cuatro partidos políticos con representación en esta institución -Bildu, PSOE y PNV- y del propio club blanquiazul.
Es el mayor consenso alcanzado que intenta contentar a los aficionados al fútbol, al rugby y al atletismo y, al mismo tiempo, rebaja el presupuesto de la remodelación, sin perder el ayuntamiento la titularidad de la instalación y lo sitúa en un terreno posible sin la aportación de las instituciones guipuzcoanas.
El día 27 deberá plasmarse el apoyo de estos tres partidos en el pleno en el que se va a someter a aprobación provisional la modificación del Plan General Urbanístico que posibilitaría la remodelación de Anoeta. Luego Lakua debería dar su visto bueno y el ayuntamiento procedería a su aprobación definitiva.
Solo entonces se podrá convocar un concurso en el que, obviamente, solo concurriría la Real para aceptar las condiciones acordadas y en el que la clave está en su viabilidad económica en un momento en el que las instituciones no pueden abordar estas macroobras.
La única fórmula de viabilidad de la obra es que la Real asumiera un porcentaje muy importante del coste del proyecto. A partir de la próxima temporada, el club va a ver aumentados en dos millones de euros los ingresos por los derechos televisivos en función del nuevo contrato firmado con Canal +. Además desaparecerán otros dos anuales que hasta enero de 2013 el club ha tenido que abonar a sus acreedores ordinarios en función del convenio.
Solo por estos dos conceptos, hay cuatro millones anuales que podrían destinarse a una inversión en el campo de fútbol sin afectar al terreno deportivo.
El mejor fichaje
El presidente de la Real, Jokin Aperribay, ha sostenido siempre que la remodelación de Anoeta es una necesidad y el mejor fichaje para el club, porque prevé que esa inversión le permitirá aumentar los ingresos por la explotación de Anoeta. Pero para poder asumir un porcentaje alto del coste de la obra se metería en un nivel de endeudamiento peligroso a largo plazo porque es tan difícil como improbable que la Diputación y el ayuntamiento de Donostia aporten dinero a esta remodelación.
En San Mamés Barria han entrado BBK y el Gobierno de Lakua para poner cien millones entre los dos. La clave estará en lo que hagan la Kutxa y el ejecutivo autonómico ahora. Además será necesario una rebaja en el presupuesto de la obra.
Con la crisis actual es posible que los 62,5 se puedan rebajar de forma importante porque habrá tanta competencia entre las constructoras para asumir una obra de esas características que deberán reducir márgenes de beneficio para conseguir los contratos que necesitan para superar la coyuntura actual.
De los más de cien millones en los que se tasó Gipuzkoarena cuando fue presentado en 2003 en un acto en el que tuvieron la poca vergüenza de apoyarlo los mismos partidos políticos e instituciones que cometieron el error de poner como condición colocar unas pistas a Anoeta, en el proyecto presentado por el equipo de Gobierno de Bildu se ha bajado a menos de la mitad y en unas condiciones ética y económicamente más asumibles.
Lo que hay que tener claro en este proceso es que Bildu no ha tenido ninguna responsabilidad ni en la colocación de pistas en Anoeta ni en el dinero público otorgado a San Mamés Barria. Si se realiza sin que el ayuntamiento de Donostia y la Diputación aporten cantidad alguna, pocos estarían en contra de la remodelación que desean los aficionados blanquiazules.
La necesidad de ampliar el aforo del estadio de Anoeta para tener más ingresos por taquillas se pondrá a prueba el sábado 29 a las ocho de la tarde, que es el horario en el que se jugará el derbi entre Real y Athletic. La Liga de Fútbol Profesional comunicó ayer un horario que tranquiliza a la entidad blanquiazul, porque ha sido declarado como medio día de ayuda al club y jugarse en un lunes habría sido muy perjudicial para que se pudiera registrar una buena afluencia de público. El Getafe-Mallorca será el partido que se jugará el lunes a las 21.30 en ese horario que se quería evitar a toda costa. El año pasado 28.923 espectadores acudieron a ver el derbi a Anoeta. Joseba ITURRIA
Carlos Martínez fue uno de los realistas que comparecieron ante la prensa ayer en la vuelta de la Real a los entrenamientos para mostrarse satisfecho con los 90 minutos jugados en Iruñea. Lamentó los problemas físicos sufridos en la pretemporada y entendió su ausencia en las listas: «Empecé con desventaja y podía suponer que me quedaba fuera en las primeras jornadas. Estoy muy tranquilo, quiero que el mister me vea bien, que he recuperado la forma y entrar en las convocatorias».
La web de la Real recordó ayer que se ha enfrentado en Donostia en 51 partidos oficiales contra el Zaragoza que visita el domingo Anoeta, saldados con un balance positivo para los blanquiazules, con 33 victorias, 13 empates y 5 derrotas desde su primer duelo liguero en 1944.