Personas disfrazadas de enterradores y, dos de ellas, ataviadas con palas y caretas de Patxi López y Gemma Zabaleta escenificaron ante la sede del Gobierno de Gasteiz en la Gran Vía bilbaina el fin de los derechos sociales en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. También llamaron a participar en la huelga general del próximo 26 de setiembre.

Bajo el lema «aquí yacen los derechos sociales», los dos enterradores echaron arena para asegurar que «con esta iniciativa, la consejera Zabaleta ha querido despedirse de su gestión haciendo repaso a los continuos recortes que han venido aplicando en el sistema de protección social de la CAV: una reducción de un 7% de la cuantía de las prestaciones sociales y la aplicación de nuevos requisitos que dejan sin derecho a las mismas, a las miles de personas que antes los cumplían y podían accidente a la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) y las Ayudas de Emergencia Social».

«López, fiel seguidor de Rajoy»

Miguel Angel Miguel, miembro de Denok Lan, remarcó que «mientras el Gobierno vasco denuncia los recortes sociales aplicados por Mariano Rajoy, aquí es fiel seguidor de los mismos al vulnerar sistemáticamente los derechos que asisten a las familias y personas usuarias de Lanbide». Recordó que «son familias sin ingresos, parados que han agotado los subsidios por desempleo, solicitantes de ayudas para el alquiler, pensionistas que reciben cantidades mínimas, entre otros casos».

Con esta iniciativa, los colectivos sociales denunciaron «el desbarajuste burocrático existente en Lanbide, «donde a un aumento de las solicitudes se une la falta de operatividad de las oficinas encargadas de tramitar las peticiones», dijo Miguel. Este hecho ha añadido «una demora de dos meses en la atención a las personas que necesitan con urgencia el acceso a prestaciones sociales para subsistir y así poder llegar a fin de mes».

En este balance de las gestión del Ejecutivo de Patxi López y la consejera Gemma Zabaleta también se puso encima de la mesa las medidas restrictivas en los expedientes para conseguir una ayuda económica o que las comunicaciones se extravían «culpando a los afectados». Por ultimo, el portavoz de los colectivos sociales recordó que hasta el Ararteko denunció las irregularidades de Lanbide.