La Asamblea General de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) no está para nada conforme con las explicaciones del Gobierno de Yolanda Barcina y del Rectorado sobre las cargas policiales contra la protesta pacífica que marcó el inicio del curso. En una rueda de prensa, anunciaron ayer que buscarán a los responsables de la agresión al alumnado «a través de vías legales».

Los portavoces de la Asamblea calificaron las declaraciones de la presidenta, Yolanda Barcina, y del consejero de Interior, Javier Morrás, de «vergonzosas». Denuncian que no asumen su responsabilidad y que aprovechan las ocasión para «criminalizar» a lo estudiantes.

En cuanto a la actitud del Rectorado, le resulta tan «desconcertante» como la de los responsables políticos. Para la Asamblea, el rector ha reaccionado con «silencio y pasividad» ante una «vulneración de la autonomía universitaria» y, por tanto, considera que la máxima dirección de la UPNA ha hecho dejación de funciones al no «defender a la comunidad universitaria». Aun así, sigue habiendo una mano tendida para el rector, ya que la Asamblea quiere «buscar una vía de actuación conjunta para esclarecer esta situación y que nunca vuelva a repetirse».

Por otro lado, la Asamblea recordó que la UPNA lleva dos años consecutivos de recortes, lo que supone «que las desigualdades sociales crecen, mientras que la igualdad de oportunidades se quiebra». Ante este escenario, la Asamblea anunció que se sumará a la huelga general del miércoles y que hará otro paro el próximo día 11 de octubre.