Con las cuatro decenas de jugadoras que abandonaron la División de Honor femenina el pasado verano para jugar en otras Ligas, más algunas retiradas sonadas (las más cercanas, las de Patri Pinedo y Andrea Barnó), se podían haber formado al menos cuatro plantillas aspirantes al título esta temporada. De ahí que una de las mayores incógnitas a desvelar consistía en comprobar cómo se iba a recomponer el ranking de la máxima categoría. Tras las cuatro primeras jornadas, cuando llega el primer parón, varios detalles apuntan ya por donde podrían ir las cosas.

LA LUCHA POR EL TÍTULO Y LAS PLAZAS EUROPEAS. Los principales favoritos ya han enseñado sus cartas. Todos apuntaban a Bera Bera en la línea de salida, y eso ha permitido a varios equipos liberarse de presión, además de convertir cada salida donostiarra en un test en que cada rival se empleará a tope conforme al planteamiento de que no hay nada que perder, y sí mucho que ganar. Bera Bera ya lo ha comprobado este fin de semana en la pista del Atl. Guardés, y quizá sirva para alertar a la plantilla. Por si no estaba claro, será una Liga complicada.

Además, el calendario de la primera vuelta aún le reserva un recorrido inquietante, ya que visitará a sus tres máximos rivales: Elche (6ª jornada), Alcobendas (8ª) y Rocasa (12ª), con el Cleba León -donde empató la pasada Liga- intercalado (10ª). Alcobendas y Rocasa comparten liderato ahora mismo, y se medirán en cancha canaria el miércoles de la próxima semana.

Las madrileñas siguen en la línea de la pasada temporada, y Teresa Francés está calcando el papel que entonces cumplía Marta López, aunque aún no se ha enfrentado a ninguno de los clubes más potentes. Rocasa ha mantenido lo mejor que tenía, y la vuelta de Trojaola le sirve para completar un excelente siete titular. Si se ve luchando por el liderato, será un rival temible.

El Elche está cumpliendo con las expectativas, y dos recién ascendidos han aprovechado un buen inicio para colarse en esta zona. El Valencia, con Mireia Payá y Sheila Segura de referentes ofensivos, no parece capaz de asentarse en esta pelea, pero el Atl. Guardés, con las hermanas Dapena y la internacional Amorós, y cuatro jugadoras extranjeras de buen nivel en su plantilla, puede convertirse en la revelación, y su pista en una plaza difícil. Información, en Bera Bera.

LA TRANQUILIDAD DE LA ZONA MEDIA. Esta temporada, más que nunca, hay muchos clubes cuya única meta consiste en asegurar la permanencia, y resulta difícil apuntar a algunos como aspirantes a algo más que luchar por evitar el descenso. Porriño y Kukullaga podrían estar entre ellos. Porriño tiene una plantilla compensada y con calidad, pero le han tocado dos huesos en casa que le han hecho trastabillar un poco. La derrota ante Bera Bera estaba dentro de lo previsto, aunque el derbi ante el Atl. Guardés no tanto. Pero se ha rehecho muy bien en sus dos salidas, y está llamado a crecer.

Kukullaga parece haber aprendido de su experiencia de la pasada temporada, sus incorporaciones mejoran lo que tenía (Zorrilla y Nogales han empezado muy bien la Liga), y dispone de dos ases en la manga: la joven Elizegi y la ucraniana Kuprichenkova. Si la joven lateral de Basauri sigue progresando puede dar muchas alegrías, y de momento ya es una importante ayuda en la defensa. Y si Kuprichenkova deja atrás su lesión, sumará a una primera línea interesante. Mar Alicante podría unirse al grupo, de la mano de Mateo, Faría y Vicente, cuya experiencia resultará crucial.

LA PRESIÓN DEL DESCENSO. Un dato anecdótico que es un aviso a navegantes: los dos últimos clasificados en la 4ª jornada de la pasada Liga, ambos con 0 puntos, descendieron. Entonces eran Kukullaga y Gijón, y ahora Castro e Itxako se encuentran en idénticas circunstancias. Por si quedaba alguna duda, a Itxako ya le han perdido el respeto. Ha caído en tantos partidos de Liga en un mes como en las tres temporadas anteriores, y sus rivales ya marcan su partido con una X. La incógnita reside ahora en saber si la plantilla aguantará la presión, porque la luz roja está a punto de encederse. Castro apenas dispone de jugadoras, y si no reacciona puede descolgarse de forma definitiva.

Quienes han dado una de cal y otra de arena han sido Cleba León, Castelldefels y Zuazo. Cleba ha tenido un inicio duro, pero cuenta con un equipo de casa y varias buenas jugadoras (Cristina González, Caño, Ilina...), y saldrá de ahí. Castelldefels es una incógnita por su juventud e inexperiencia, y Zuazo necesita asentarse alrededor de sus mejores jugadoras, Yáñez, Hernández, Ahedo y Temprano. Sus dos partidos de casa, abiertos hasta el último segundo, deben animarlas a pelear por cada punto.