En la presentación de la Memoria Fiscal de 2011, el máximo representante del Ministerio Público en la CAV, Juan Calparsoro, detalló ayer que los procedimientos penales se redujeron especialmente en Gipuzkoa (5,9%), seguida de Bizkaia (4,7%) y Araba (0,6%), aunque no ocultó su preocupación por el aumento de los delitos vinculados con la situación de crisis económica. Entre los ejemplos citados, mencionó que los robos en viviendas habitadas han pasado de 1.577 casos en 2010 a 2.245. El fiscal superior subrayó en este punto que en muchos casos son bandas formadas por personas extranjeras.

Respecto a los delitos que el fiscal cree que pueden tener relación con la crisis, crecieron los procedimiento incoados por impago de pensiones para el mantenimiento de menores (un 39% en Araba, 15% en Gipuzkoa y 37% en Bizkaia) y por estafas (15%), con un repunte de las denuncias por engaños en la firma de préstamos por parte de prestamistas particulares que «inevitablemente concluyen en desahucios», según la memoria.

También se incrementaron los delitos por falsedad (64%, sobre todo, en el ámbito mercantil) y contra la hacienda pública (44 supuestos en 2011 frente a 30 del año anterior). Por su parte, los delitos societarios crecieron un 200%, lo cual, según el fiscal, «no es ajeno» a la coyuntura económica y a los procesos de reestructuración de empresas, mientras que los delitos por prevaricación han aumentado un 77%.

Según Juan Calparsoro, la tensión en el ámbito familiar por problemas económicos puede ser «un caldo de cultivo» que explique el incremento de delitos de violencia de género registrado (un 13,6 %).

En todo caso, aumentaron también las denuncias por violencia «ocasional» en noviazgos, que, según el fiscal, evidencia «relaciones de dominación en las parejas», por lo que Calparsoro aconsejó la implementación de medidas educativas para «desterrar» conductas discriminatorias hacia la mujer.

La memoria también recoge un incremento del 43% en los delitos de homicidio y asesinato, si bien la mayoría fueron en grado de tentativa. En concreto, se produjeron dos muertes por violencia machista frente a los cinco casos de 2010, una en Gipuzkoa y otra en Bizkaia.

La Fiscalía también detecta un incremento de los delitos contra la libertad sexual en Araba y Gipuzkoa -en Bizkaia descienden ligeramente- y en su memoria advierte de que en un porcentaje mayoritario el agresor pertenece al entorno familiar o de amistad.

Alerta de la posibilidad de que la relación del agresor con la víctima conlleve «cierta tendencia a la inhibición de los padres o tutores» a la hora de colaborar en la persecución del delito, según la memoria, en la que expresa, asimismo, su «honda preocupación» por la protección de los menores contra la violencia sexual que contra ellos se pueda cometer vía internet; con ocho acusaciones en relación al tráfico de material pedófilo.