Los leones se juegan buena parte de su futuro en la Europa League
¿Primavera en Praga?
Ibai Gómez por Isma López es la única novedad en el once que pondrá en liza Bielsa ante un Sparta muy físico, al que le gusta el balón y del que el argentino destacó su «agresividad y actitud atacante».
S.PRAGA-ATHLETIC
Joseba VIVANCO
«Jak se do lesa volá, tak se z lesa ozyvá», refrán checo que viene a significar algo parecido a aquello de «quien juega con fuego, acaba quemándose». Y eso es precisamente lo que el Athletic de Bielsa debe evitar por lo civil y por lo criminal hoy en Praga, la ciudad dorada, la de las cien torres, la dama de las ciudades. El Sparta lleva ocho partidos seguidos sin perder como local en competiciones europeas; el Athletic no ha ganado ninguno de sus tres últimos encuentros en Europa como visitante. El Sparta viene de perder cuatro partidos consecutivos; el Athletic... tampoco está para echar cohetes.
Los rojiblancos buscan su propia `primavera de Praga' pero en pleno otoño y lo hacen ante un equipo que dentro de la velocidad y rigor físico que prima en el fútbol checo, le gusta atacar, jugar y mover la pelota. Por eso puede ser un rival `asequible' para los de Bielsa, pero a la vez un rival también peligroso, plagado de jóvenes y talentosos jugadores, de los que dos han sido convocados para la sub21 checa y otro para la albanesa, además de su medio Husbauer para la selección A y el lateral Pamic a la de Croacia. Y ojito con su punta camerunés Leo Kweuke.
Un Sparta que, según el veterano exzaragozista Jiri Jarosik, «espero que como el Bilbao tiene sus problemas, habrá oportunidad de hurgar en la herida». Su preparador, Vlastimil Vidlicka, aspira a aprovechar los «huecos que dejan cuando se abren» y dejó claro que «no vamos a especular».
La entrada de Ibai Gómez por un Ismael López que reconocía esta semana no estar al cien por cien, será la única novedad en el once del argentino. Llorente, lo confirmó ayer el técnico, seguirá en la banqueta, donde estará también un recuperado Herrera. Marcelo Bielsa sorprendió ayer al aseverar que «el plantel actual en comparación al de la temporada pasada es mejor», aunque asumió que «evidentemente los números del equipo y algunas partes grises indican lo contrario», admitiendo que «las expectativas no se concretan».
El rosarino rechazó escudarse en la ausencia de Javi Martínez para explicar el mal rendimiento del equipo, aludiendo a que «el que le reemplaza está siendo el mejor», en alusión a un Gurpegi muy cuestionado por la afición en ese puesto de central.
«Llorente no juega porque hay una situación vinculada con los cuatro meses de Fernando en los que no tuvo actividad futbolística regular. Creo que necesita adquirir una forma deportiva que no es sencilla», explicó ayer Marcelo Bielsa sobre la no titularidad del `9'. En cuanto a la expulsión del entrenamiento del lunes, aclaró que «interpreté que la aportación a las tareas no era la deseada y no era conveniente seguir insistiendo, por eso le indiqué que había finalizado». Quiso enmarcarlo en que el `desencuentro' se produjo en un momento delicado -«mi sensibilidad venía dañada»- tras perder el derbi. «El estado de ánimo no es el mejor, pero que falte paz no quiere decir que falte unión», zanjó, para añadir que «yo entendí que su aportación era insuficiente y Fernando entendió que lo estaba dando todo y así me lo hizo saber. Son interpretaciones subjetivas de un mismo hecho». Y añadió: «Yo le creo, la razón le asiste a él», asintió Bielsa, quien de paso, advirtió que «Llorente no merece que le reprueben», en referencia a la afición. «Sería injusto», porque él «no tiene nada que ver en el rendimiento del equipo». Bielsa le exculpó de puertas afuera, pero le sentará de nuevo en el banquillo de puertas adentro. Sabio Bielsa. J.V.
