Alumnos del colegio Mendialdea de Berriozar volvieron a subir juntos al centro desde la plaza Donantes de Nafarroa, ubicada en el casco principal de esta localidad de Iruñerria, para volver a denunciar la decisión del Gobierno navarro de suprimir el autobús escolar.

Desde que comenzó el curso, los padres y madres del colegio Mendialdea II han protagonizado movilizaciones para dejar en evidencia que la decisión del Departamento de Educación que dirige José Iribas pone en riesgo la seguridad de sus hijos, que se ven obligados a cruzar andando varias calles y un polígono sin acera para acceder al centro. La alternativa de llevar a los niños en coche provoca un colapso diario de tráfico en la zona en la que se sitúa el colegio Mendialdea, alejada de la mayoría de las viviendas de Berriozar.

La pasada semana, la apyma de Mendialdea II culpó a Iribas del accidente que sufrió un alumno al ser atropellado por un vehículo en las inmediaciones del centro y anunciaron que continuarán con las movilizaciones hasta que Educación les dé una respuesta.

En este sentido, los integrantes de la apyma de Mendialdea II se volverán a concentrar hoy ante el Parlamento navarro, donde se votará una moción presentada por PSN, NaBai, Bildu e I-E en la que se insta al Departamento de Educación a continuar con la financiación del transporte público escolar en varios centros navarros.

La única alternativa que tienen los padres del colegio Mendialdea es pagar de su bolsillo el transporte de sus hijos en autobús, lo que criticaron duramente al suponer un gasto suplementario para las familias en una localidad duramente afectada por la crisis.

Reunión en Sopuerta

Por otra parte, los padres que reclaman al Gobierno de Lakua la implantación de Primaria en el centro de educación infantil La Baluga de Sopuerta, donde la única oferta actualmente es el centro privado San Viator, celebrarán hoy una reunión con la Administración.

En este sentido, la viceconsejera de Educación, María Antonia Ozcariz, ha remitido a los padres de Sopuerta una carta en la que se compromete a realizar los trabajos administrativos oportunos para determinar la conveniencia de implantar aulas públicas de Primaria en Sopuerta.

Los padres valoran esta carta como un primer paso «para recuperar la capacidad de decisión sobre su propia infraestructura, una capacidad que ahora ostenta el Obispado en virtud de las `escrituras trampa' del terreno sobre el que el Departamento invirtió en construir la escuela pública».

«Esperamos el resultado de este primer encuentro, del que, en parte, dependerá el inicio de otras acciones legales, suspendidas en su momento por querer entender una voluntad positiva de los responsables del Departamento», señaló Jorge Rodríguez, portavoz de los padres afectados, que se han asociado oficialmente bajo el nombre Elkarrekin Bai.