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Elecciones del 21 de octubre

España ya solo busca vencer, no convencer

Ramón SOLA

A los presidentes y expresidentes de un gobierno, y más si es un gobierno con mando sobre 47 millones de personas, se les supone ante todo una alta capacidad de persuasión política. Parece realmente inverosímil llegar hasta tal cargo sin ese don. La política, en el fondo, no debería ser más que eso: convencer para ir ganando voluntades, o sea, votos. Por eso es muy significativo comprobar que dirigentes como Felipe González y Mariano Rajoy ya han tirado la toalla en Euskal Herria. El primero, con catorce años de experiencia en La Moncloa, se limitó el sábado en Barakaldo a decir que «no habrá independencia en ningún territorio de España. Quien crea que esa breva está madura, no es verdad. Sí existe el derecho de autodeterminación, pero es de los españoles». El segundo, el actual presidente español y por tanto el más acuciado por la cuestión, tampoco hizo esfuerzo alguno en atraerse a la opinión pública vasca, ninguna zanahoria en su bolsillo, solo el palo: «La independencia es un disparate colosal y no lo vamos a aceptar de ninguna manera».

González y Rajoy, Rajoy y González, para decir lo mismo: que no habrá independencia... porque no. Solo quedan dos opciones de interpretación: o se han convertido en pitonisos, que no consta, o lo fían todo a su fuerza. Lo seguro es que no confían nada en su capacidad de defender que para los vascos sería mejor seguir con el DNI español. ¿Alguien ha escuchado a PSOE y PP en esta campaña alguna razón en positivo, alguna propuesta con capacidad de arrastre, algún propósito de reinventar la unidad española como oferta, algo que no sea amenazar veladamente con la fuerza, asustar en vano con las pensiones o fantasear con la historia de 500 años que se les derrumba? Visto lo visto, quizás sea hora de, como apuntaba ayer Francisco Letamendia Ortzi en estas páginas, contraatacar y empezar a convencer a los votantes de PSE y PP de que no tiene sentido un proyecto que ya ni siquiera defienden sus propios líderes.

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