SEGUNDA B | Derbi en Tajonar
El Alavés reacciona a costa de un Promesas hundido
Los albiazules se mantienen al frente de la clasificación, que cierra el filial rojillo con un solo punto.
OSASUNA 0
ALAVÉS 2
GARA | IRUÑEA
Cara y cruz. Líder y colista se dieron cita en el derbi de Tajonar y se fueron como habían llegado. O casi. Porque el Alavés salió reforzado de la cita, ya que le permitió reencontrarse con el triunfo tras los dos últimos traspiés, y Osasuna acabó aún más hundido de lo que estaba, no en vano encajó su séptima derrota de una temporada en la que apenas ha sido capaz de sumar un punto. Ayer plantó cara, pero no estuvo nada afortunado ante un rival liderado por un Guzmán estelar.
Comenzó fuerte el Alavés, forzando un córner tras una internada, cómo no, de Guzmán, y con remate final desviado de Óscar Rubio. Los de Natxo González hacían una fuerte presión en el centro del campo ante la necesidad de puntos de un Promesas que también salió con espíritu ofensivo. Carnicer dispuso de la primera oportunidad de los locales, a la que respondió Asier Barahona con un intencionado remate sobre la barrera del cuarto de hora. Los gasteiztarras creaban peligro a balón parado y un remate de Luciano andaba cerca de la meta osasunista.
Cada vez era más evidente la presencia en ataque alavesista, hasta que en un balón al área, un rechace de la defensa le llegaba a Guzmán, que había iniciado la jugada por su banda, para que su remate se convirtiera en el 0-1. Aparecía la lógica clasificatoria, que a punto estuvo de aumentar su peso a renglón seguido, cuando un envío de Rubén Negredo se perdía a dos palmos del poste de la meta de Cantero.
El partido era ya un monólogo de los alavesistas, ante un filial con coraje pero poco más. Un gol de Jonan era anulado por el colegiado, y poco después un intencionado disparo de Beobide acababa en saque de esquina. Los locales apenas se acercaban a los dominios de Miguel, de regreso bajo los palos.
Tras el paso por vestuarios, el Promesas rozó el empate, con un cabezazo que forzó una gran intervención de Miguel. La respuesta visitante no tardó en llegar. Rozó la sentencia Beobide y también lo hizo Negredo, con un duro disparo que hizo intervenir con mucho acierto al portero rojillo.
Polémica sin consecuencias
También hubo espacio para la polémica, con un claro penalti de Cantero sobre Guzmán que el colegiado pasó por alto. No pareció afectar a los visitantes, que siguieron buscando el segundo con denuedo, ante un rival que se limitaba a defenderse.
Pero con el transcurso de los minutos, el miedo rojillo se transformó en necesidad y Osasuna se lanzó a por el empate, embotellando al Alavés en su área. Cuando se enfilaba la recta final del partido el cuadro navarro estuvo cerca del gol en un centro de Hugo que Galán no acertó a rematar.
Infortunio con puntilla porque, ya en tiempo añadido, el colegiado sí vio un claro penalti en el área iruindarra con el que Guzmán, el mejor de su equipo, sentenciaba definitivamente el encuentro.