Elecciones del 21 de octubre
La sociedad premia en las urnas a los implicados en la Conferencia de Aiete
Se cumple hoy un año de la Conferencia Internacional de Aiete, que se cerró con la declaración que pedía el cese definitivo a ETA, diálogo a Madrid y París y una solución política a los partidos. Fue la antesala del fin de la lucha armada de ETA. El electorado lo vio como algo positivo y premió a quienes se implicaron en aquella acción. Lo hizo en las elecciones estatales y, según los sondeos, volverá a hacerlo también ahora.
I.IRIONDO | GASTEIZ
El 17 de octubre de 2011, hoy hace un año, tuvo lugar en el Palacio de Aiete de Donostia la Conferencia Internacional para Promover la Resolución del Conflicto en Euskal Herria. El encuentro había sido organizado por Lokarri, el Grupo Internacional de Contacto y las entidades Berghof Foundation (Alemania), Conciliation Resources (Gran Bretaña), The Desmond and Leah Tutu Legacy Foundation (Sudáfrica) y Norsk Ressurssenter for Fredsbygging (Noruega).
El ex secretario general de la ONU Kofi Annan; el ex jefe de Gabinete de Tony Blair y negociador en el proceso del Norte de Irlanda, Jonathan Powell; el dirigente e interlocutor de Sinn Féin Gerry Adams; el ex primer ministro irlandés Bertie Ahern; la ex primera ministra noruega Gro Harlem Bruntland; y el exministro francés Pierre Joxe se dieron cita en Donostia con representantes políticos, sindicales y sociales vascos. Faltaron PP y UPN, pero no todos los que acudieron lo hicieron con igual implicación.
De aquel encuentro salió una importante resolución en la que se pedía a ETA «el cese definitivo de la actividad armada», al tiempo que invitaban «a los gobiernos de España y Francia a darle la bienvenida y a aceptar iniciar conversaciones para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto». La Declaración de Aiete anima a dar pasos hacia la reconciliación y el reconocimiento de las víctimas e invita a los representantes de los partidos al diálogo sobre cuestiones políticas y a la consulta a la ciudadanía.
Tres días después, ETA hacía pública una declaración en la que otorga «gran trascendencia política» a la Conferencia Internacional» y asegura que la resolución salida de Aiete «reúne los ingredientes para una solución integral del conflicto». En consecuencia, y tras otras consideraciones, anuncia el final definitivo de su actividad armada.
Estar a lo que hay que estar
La Conferencia Internacional de Aite, como es lógico, no tuvo una finalidad electoral, pero permitió que la ciudadanía observara quiénes habían participado y quiénes no de aquella iniciativa, quiénes estaban trabajando por la resolución del conflicto y quiénes o trataban de obstaculizarla o se situaban como meros espectadores. Y eso, luego, tiene su traslación a las urnas, entre otros factores, en forma de premio y castigo
La celebración de la Conferencia de Aiete fue posible gracias al trabajo que en el ámbito internacional había realizado durante años la izquierda abertzale. El PNV, con Iñigo Urkullu a la cabeza, realizó una importante aportación. El Gobierno del PSOE dejó hacer y, según trascendió después, no estuvo a la altura de los compromisos adquiridos con los agentes internacionales. El PSE acudió a Aiete, pero fue por cabezonería de su presidente, Jesús Eguiguren, que anunció a su partido que estaría presente quisieran o no. Enviaron al exalcalde de Ermua Carlos Totorika a acompañarle, vigilarle y contraprogramarle. Entre tanto, el lehendakari, Patxi López, estaba en Nueva York, en un viaje incomprensible para la mayoría de los vascos. Desde el PP, Antonio Basagoiti no dudó en burlarse de los firmantes de la Declaración.
Al mes, en las elecciones a Cortes españolas, el mapa electoral de la CAV daba un vuelco y por primera vez en este tipo de comicios las fuerzas unionistas quedaban tercera y cuarta. El trabajo activo por la paz y la normalización ya había tenido premio en las elecciones municipales y forales meses antes, y la tendencia se consolidaba tras la Declaración de Aiete.
Todavía hoy, Patxi López sostiene que la Conferencia no tuvo que ver con el fin de la lucha armada. Según las encuestas, no verá desde Ajuria Enea la disolución de ETA. El otro negacionista, el PP, será la cuarta fuerza en el Parlamento de Gasteiz.
La visión ciudadana del compromiso con la resolución del conflicto no es indiferente en los resultados electorales. La izquierda abertzale lo ha sufrido y lo ha gozado en carne propia.
La declaración suscrita en Aiete hace un año recabó inmediatamente importantes apoyos de referentes internacionales que le dieron la bienvenida. El ex primer ministro británico Tony Blair escribió un largo artículo en «The New York Times» y Gerry Adams, líder del Sinn Fein,hizo una intervención en la CNN.
El expresidente norteamericano Jimmy Carter, el senador norteamericano George Mitchell, la oficina del secretario de prensa de la Casa Blanca, la Fundación Clinton, el Caucus de congresistas amigos de Irlanda, Amnistía Internacional, el Friendship en el Parlamento Europeo, el N-VA flamenco mediante su eurodiputada Frieda Brepoels, el grupo político en el Parlamento Europeo de European Free Alliance (EFA), el presidente venezolano, Hugo Chavez, el Gobierno de Uruguay y otros importantes agentes internacionales valoraron de manera positiva aquellos hechos.
En noviembre, 24 parlamentarios británicos impulsan una iniciativa que pone en valor la Declaración de Aiete y la decisión posterior de ETA de poner fin a su actividad armada. También en los parlamentos de Alemania y Suiza ha habido declaraciones institucionales de apoyo a la solución dialogada.
El Foro de Sao Paulo consideró histórica la Conferencia Internacional de Aiete, que en abril concitó el apoyo de unas quinientas personalidades del Estado español que suscribieron e hicieron público el Manifiesto Madrid-Donostia. GARA